
El mercado residencial en España cerró 2022 con muestras innegables de resiliencia pese a un contexto económico global adverso. Para 2023, se prevé que la demanda siga mostrándose sólida y dinámica, superando la oferta en el caso de la obra nueva y destacando el interés por parte del perfil inversor, por lo que se estima que el precio de la vivienda presente un ligero repunte, según informan desde Servihabitat.
Iheb Nafaa, consejero delegado de Servihabitat, ha dicho que «en 2022, hemos constatado la alta intensidad con la que se ha comportado la demanda y que ha repercutido en un crecimiento saludable en el ritmo de las operaciones». En este sentido, Nafaa ha puntualizado que «por más que las progresivas subidas en los tipos moderaron los ritmos de venta a final de año, también adelantaron muchas compras. Elementos como el ahorro acumulado y un entorno de financiación favorable han sido claves para impulsar las compraventas».
En cuanto a la previsión realizada por Servihabitat para este ejercicio, se estima que el sentimiento de prudencia que marcará el acceso a la primera vivienda quedará relevado por el inversor, que desea colocar su capital en activos defensivos. Nafaa ha apuntado que, «aunque deberemos seguir de cerca la evolución en los costes de construcción, los tipos de interés y el acceso a la financiación, el sector inmobiliario va a generar nuevas oportunidades de inversión».
El comportamiento de las viviendas transaccionadas en 2022 prolongó la efervescencia que se inició en 2021 tras la pandemia, cerrando un ejercicio con cerca de 720.000 compraventas, lo que supone un crecimiento interanual del 6%. Con los datos actuales, es muy probable que este indicador se muestre resiliente y apenas se resienta a lo largo de 2023. Según Servihabitat, la reposición en vivienda y la inversión sostendrán el nivel de operaciones, que volverán a situarse en torno a las 700.000.
En cuanto al precio de la vivienda, la alta demanda compradora ha tenido una gran influencia en la trayectoria alcista de este indicador. Se estima que el precio de la vivienda continuará repuntando este año, aunque la prudencia en la conducta del comprador relajará significativamente las subidas, suavizándolas hasta el 4,4%.
Por último, el comienzo de nuevos proyectos caerá un 8,5% en 2023, alcanzando las 86.700 viviendas iniciadas, condicionado por el crédito promotor y los costes de construcción.