En respuesta a la reciente aprobación de la línea de avales ICO-Mitma, dirigida a jóvenes y familias con menores a su cargo para la adquisición de la primera vivienda, Fotocasa ha realizado un análisis para evaluar el alcance de esta medida.
Según Fotocasa Research, un 15% de los mayores de 18 años podría beneficiarse de este aval gubernamental para la compra de su primera vivienda. Entre este grupo, un 41% tiene la intención de comprar en los próximos 5 años, aunque algunos están posponiendo la decisión debido a factores económicos, laborales, falta de ahorro o tasas de interés.
Esta ayuda se materializa en avales del 20%, y en algunos casos del 25%, para la entrada de la primera vivienda, permitiendo así obtener hasta el 100% del préstamo hipotecario.
Para acceder a este aval, es necesario cumplir con ciertos requisitos, como tener 35 años o menos en el momento de la compra o ser una familia con menores a su cargo, ingresos anuales inferiores a 37.800 euros por persona (o un 0,3% más del IPREM por cada hijo, en el caso de las familias), residir en España, y tener DNI o NIE, entre otros.
Según María Matos, directora de estudios y portavoz de Fotocasa, se trata de «una medida positiva que fomenta el acceso a la compra, y que ayuda a equilibrar el mercado, ya que la ley de vivienda solo se centra en el alquiler. Este aval facilita el acceso a la primera vivienda de los jóvenes, en un momento en el que la demanda de compra entre los menores de 35 años ha descendido 10 puntos porcentuales a causa de la nueva situación económica. Por lo que puede ser un halo de esperanza para llegar a cumplir su objetivo de convertirse en propietarios».
Además, es «una iniciativa que el propio Mario Dragi, expresidente del BCE ya ha puesto en marcha en Italia, por lo que es positivo que nuestros jóvenes y familias sin recursos también tengan esa opción. Está demostrado que la propiedad ayuda a los ciudadanos a generar riqueza», recuerda Matos.
Alcance de los avales del ICO para la compra de la primera vivienda
Fotocasa señala que, del conjunto de particulares, hay un 15% que podría acogerse a esta línea de crédito para acceder a la compra de vivienda. Este es el porcentaje sobre la población mayor de 18 años que no es propietaria de una vivienda y que cumple los requisitos económicos y demográficos (edad o situación familiar) que se exigen para acceder al aval público.
En el caso de Andalucía, la cifra es aún mayor: un 37% de los particulares de esta comunidad autónoma cumplen los requisitos para solicitar el aval, cifra que la convierte en la región con la mayor proporción de posibles beneficiarios, seguida por Cataluña (15%), la Comunidad Valenciana (14%), y Madrid (10%).
Existen dos vías de acceso a esta medida: la de particulares que tengan 35 años o menos y la de familias con menores a su cargo, sin limitación de edad. De acuerdo con los requisitos de propiedad y económicos, un 11% de los particulares mayores de 18 años podría acceder por la vía de la edad, mientras que la vía familiar aporta el 4% restante hasta completar el 15% total.
Al analizar más detenidamente las estadísticas de posibles beneficiarios menores de 35 años, se observa que existe una mayor probabilidad de acceder al aval público para los jóvenes solteros (7%) en comparación con aquellos que tienen pareja (3%). Esta discrepancia tiene su origen en los límites de ingresos establecidos para los potenciales compradores.
Al realizar un análisis territorial, se constata que Andalucía lidera en ambos casos el porcentaje de posibles beneficiarios. En concreto, un 6% de los particulares andaluces podrían acceder a través de la vía familiar, mientras que un 16% lo haría por la vía de la edad. En contraste, Madrid presenta los porcentajes más bajos en ambos casos, con un 3% en el ámbito familiar y un 7% en el de los jóvenes.
Intención de compra
Dentro del grupo de población que podría beneficiarse de esta medida, un 41% tiene la intención de comprar una vivienda en los próximos cinco años. Este porcentaje se divide en un 14% que planea comprar en dos años o menos, y un 27% que tiene previsto hacerlo en un periodo de dos a cinco años.
Además, un 34% no tiene planes inmediatos, pero no descarta adquirir una vivienda en el futuro, mientras que un 25% no tiene previsto hacerlo ni a corto ni a largo plazo.
Estos datos indican un mayor interés de compra en este segmento en comparación con el resto de la sociedad. Es notable que este 41% de potenciales compradores en los próximos 5 años supera en 20 puntos al 21% registrado entre el conjunto de particulares mayores de 18 años que actualmente no buscan vivienda.
Al analizar las previsiones de compra entre los potenciales beneficiarios menores de 35 años y familias, se observan diferencias. Los jóvenes muestran una mayor predisposición a comprar una vivienda, siendo un 42% de aquellos entre 18 y 34 años los que aspiran a hacerlo en los próximos cinco años. Esta cifra es más alta entre los jóvenes en pareja (55%) y algo menor entre los solteros (37%). Además, solo un 22% de los que cumplen los requisitos.
