José Luis Martínez-Almeida, alcalde de Madrid, ha anunciado que el Ayuntamiento madrileño suspenderá de «inmediato» el otorgamiento de licencias nuevas para viviendas de uso turístico y que multiplicará las sanciones a los pisos turísticos ilegales, todo ello hasta que el Gobierno municipal apruebe definitivamente el nuevo plan urbanístico de la localidad.
Hasta la fecha, según Martínez-Almeida, la primera sanción para una vivienda turística ilegal era de 1.000 euros, la segunda de 2.000 y la tercera de 3.000, pero, desde hoy, la primera sanción será de 30.000 euros, la segunda de 60.000 y la tercera de 100.000.
El alcalde de la capital de España ha explicado que estas dos medidas estarán vigentes hasta que el Gobierno municipal tenga las nuevas normas urbanísticas de la ciudad, cuya aprobación inicial se espera para el próximo septiembre.
Hasta entonces, el Gobierno municipal tomará otras medidas de manera inmediata: se aumentará un 15% la plantilla de inspectores para poder perseguir las viviendas de uso turístico ilegal y se publicarán las direcciones «exactas» de los pisos turísticos que sí son legales para que los usuarios sepan si están arrendando una vivienda turística legal o ilegal.
Cataluña regula el alquiler de temporada
Por otro lado, el Govern catalán ha aprobado esta semana un decreto ley que regula el alquiler de temporada en Cataluña para evitar la «picaresca» de los propietarios que se pasan a este tipo de contratos para eludir la aplicación del límite de rentas, restringiendo sus usos e introduciendo sanciones.
En concreto, el decreto ley modifica la ley catalana de la vivienda de 2007 y acota los usos en los que los contratos pueden considerarse de temporada para diferenciarlos de los permanentes, que son los obligados a aplicar el tope de precio si están localizados en zonas de mercado tensionadas y son propiedad de grandes tenedores.