Desde finales de 2019, el mercado inmobiliario portugués ya registraba una desaceleración. No se produjo una reducción de los precios, pero el crecimiento se mantuvo estable. Aunque el país luso se encuentra en la lista de los menos afectados por el coronavirus en Europa, el segmento residencial se ha visto resentido por su llegada.
Después de dejar atrás los meses más duros de la pandemia, se confirma que los estragos que sufrió el mercado residencial de Portugal en un primer momento se mantienen. Así, el precio medio de las viviendas en venta alcanzó los 341.089 euros en julio, lo que supone una caída del 1,7% respecto a junio, según datos del portal inmobiliario portugués Imovirtual.
En este sentido, las regiones turísticas y las ciudades más importantes como Lisboa u Oporto es donde se están registrando los ajustes de precio más elevados, y se espera que se sigan produciendo caídas moderadas.
La localidad que registró el mayor descenso en el precio de las viviendas en venta en julio fue Faro, con una bajada del 1,8% respecto al mes anterior. Le siguieron Lisboa, con un ajuste de casi 1,7% y un precio medio de 542.996 euros -la región más cara del país luso-; la isla de Madeira, con una caída del 0,9%; y Setúbal, donde el importe medio por operación disminuyó un 1,3% menos.
A pesar de las recientes caídas, «nuestro barómetro mensual muestra la resistencia relativa de los precios de las propiedades en un entorno desafiante», ha explicado Bruno Coelho, marketing manager de Imovirtual.
Aumento interanual del precio
Aunque el precio medio de la vivienda en Portugal sufrió un descenso de más del 1,7% en julio, se produjo un incremento del 5,2% en tasa interanual, con grandes diferencias dependiendo de la zona geográfica. Las subidas más notables se dieron en el distrito de Vila Real, con una subida de casi el 13%, respecto julio de 2019; y Évora, que registró un aumento del 12,1%.
Mientras que las caídas más importantes se registraron en Portalegre, con un desplome del 23,9%, pasando un precio medio por vivienda de 150.400 euros en 2019 a 114.483 en 2020. «El distrito sigue siendo el más barato para adquirir propiedad», han asegurado desde la plataforma
El precio del alquiler cae
En cuanto al alquiler, los precios disminuyeron un 2,9% en julio en comparación con el mes, al descender de 1.096 euros mensuales a 1.044 euros. Las caídas más importantes se dieron en el distrito de Guarda, donde el precio medio del alquiler cayó un 10,1%; y Faro, con una bajada del 7,7%. Por el contrario, la subida más alta se dio en Braganza, con un aumento del 14,8%.
En este sentido, el precio más alto del alquiler se registró en el área de Lisboa, donde el importe mensual medio fue de 1.418 euros. A otro nivel, le siguió Oporto, con un precio medio de 959 euros al mes, y Faro, con 900 euros mensuales.
Asimismo, el alquiler presentó una caída del 8% en julio en tasa interanual, es decir, respecto al mismo mes de 2019. Los distritos donde se produjeron los descensos más significativos en tasa interanual fueron Oporto, con una bajada del 14%; Vila Real, con un ajuste del 11,4%; y Lisboa, con un descenso del 8,5%.
Por el contrario, el distrito de Beja registró un aumento del 43,2% en el precio promedio anunciado, pues el importe medio mensual subió de 414 euros en julio de 2019 a 593 euros en mismo mes del ejercicio actual.
Así, el importe mensual de la renta en Portugal encadena ocho meses de descensos, desde que comenzó a bajar en diciembre de 2019, cuando el precio medio se situaba en 1.203 euros, según Imovirtual.
