El mercado de alquiler sigue en aumento en España, impulsado por la creciente dificultad de acceso a la propiedad. Un informe reciente de Fotocasa, titulado «Experiencia en alquiler en 2024», muestra que el 43% de los inquilinos vive de alquiler por no poder permitirse comprar una vivienda, lo que representa un aumento de cinco puntos porcentuales respecto al 38% registrado en 2023. Este incremento subraya el creciente desafío al que se enfrentan muchos ciudadanos para acceder a una vivienda en propiedad.
El informe también revela que el 16% de los inquilinos está a la espera de una bajada en los precios de las viviendas, mientras que un 22% afirma que el alquiler les ofrece la movilidad laboral que necesitan. A pesar de esto, la percepción de que alquilar ofrece flexibilidad y libertad ha disminuido, cayendo del 23% en 2022 al 14% en 2024. Estos datos apuntan a un cambio en las razones por las que las personas optan por alquilar, con factores económicos y laborales ocupando un lugar central.
María Matos, directora de Estudios de Fotocasa, destaca que «el principal motivo por el cual muchos recurren al alquiler es la imposibilidad de adquirir una vivienda en propiedad». Según Matos, los altos precios de la vivienda, junto con la escasa oferta y las condiciones laborales precarias, están impidiendo que muchas personas puedan dar el paso hacia la compra. Además, la subida de los tipos de interés por parte del Banco Central Europeo ha complicado aún más este acceso, situando a los compradores potenciales en uno de los momentos más difíciles de la historia reciente para acceder al mercado inmobiliario.
El informe también señala que la movilidad laboral sigue siendo una razón importante para alquilar, mencionada por el 22% de los inquilinos, cifra que se mantiene igual que en 2023. Otros factores como la falta de interés en la compra de una vivienda y el encarecimiento de las hipotecas también juegan un papel relevante, aunque con un menor impacto en comparación con años anteriores.
Por otro lado, el argumento de que el alquiler proporciona mayor libertad ha ido perdiendo fuerza. En 2022, un 23% de los inquilinos defendía esta postura, mientras que en 2024 solo el 14% sigue sosteniendo esta idea. Esta tendencia a la baja comenzó en 2021, cuando un 26% lo consideraba un factor clave.
En cuanto a los motivos personales para alquilar, el cambio de lugar de trabajo o estudios sigue siendo la razón principal, representando el 30% de los casos, seguido por la mejora de la vivienda con un 26%. Otras razones importantes incluyen iniciar una vida en pareja (23%) y la búsqueda de independencia (22%).
Existen diferencias notables según la región y la edad. En Andalucía, por ejemplo, la movilidad laboral tiene un peso significativo, mientras que en Cataluña se prioriza la mejora de la vivienda. Por edad, los más jóvenes tienden a alquilar por razones vinculadas al ciclo vital, como independizarse o mudarse por trabajo, mientras que los mayores de 35 años suelen hacerlo por mejorar su vivienda actual.