

El servicer Aliseda Servicios de Gestión Inmobiliaria mantiene el tipo, a pesar de la crisis sanitaria. En 2020, cayó en ingresos un 9,35%, pero logró recortar sus pérdidas. El pasado ejercicio facturó 123,6 millones de euros, frente a los 136,4 de 2019.
Mientras en 2019 declaró un deterioro de sus activos de 124,1 millones, en 2020, no hubo cambios. Esto permite que en el resultado final del ejercicio haya pasado de perder 161,7 millones, en 2019, a solo 27 millones, en 2020.
En el balance, los activos inmovilizados intangibles cayeron considerablemente, hasta los 206,9 millones. Esto supone una pérdida de más del 15%, respecto a 2019. El activo corriente aumentó en 9 millones debido a una ampliación de la tesorería. Aliseda SGI acumula 49 millones de euros en cuentas, más del doble del que guardaba en el año prepandemia.
Los pasivos no corrientes cayeron en 21 millones. Con su tesorería podría cubrir las deudas a largo plazo que mantiene, 40,06 millones. Una de las partidas que redujo en el ejercicio fue los pasivos con otras empresas del doble, que pasaron de 32,6 a 9,92 millones.
Esta sociedad la Sociedad gestiona los activos inmobiliarios del Banco Popular, desde 2013: préstamos promotor, préstamos a particulares con garantía y gestiona o vende inmuebles. Aunque fue fundada por la entidad ya quebrada, en 2017, entró Blackstone en el accionariado. Compró por 180 millones el 51% Aliseda Servicios de Gestión Inmobiliaria