
La inversión hotelera cierra el primer semestre del año con un volumen total de 1.521 millones, registrando una de las mejores marcas de los últimos años. La cantidad supone un 35% de aumento en la tasa interanual con un total de 68 operaciones (9.707 habitaciones) entre compras de hoteles existentes, edificios para reconvertir y suelos para desarrollar proyectos hoteleros. Así lo confirman los datos que Colliers ha presentado en el Foro Hospitality on the Rise, organizado conjuntamente con IE University Alumni Club del RE.
A pesar del contexto actual, la cifra significa la total recuperación de inversión inmobiliaria en este segmento y el buen estado del apetito inversor.

Por tipo de activo, el segmento urbano gana al vacacional, registrando una cifra de inversión de 873 millones (57,4%) y 648 millones (42,6%), respectivamente.
En este contexto, la capital lidera el ranking convirtiéndose en el destino favorito de la inversión hotelera en España, con un total de 443 millones (el 29,1% del total del primer semestre). En el podio, le siguen Islas Baleares, dominando el mercado vacacional con 293 millones, y la ciudad condal, con 220 millones en el tercer puesto.
Otro de los focos de atención en inversión hotelera es Málaga, con un interés que ha aumentado tras la pandemia y registra un volumen de otros 200 millones. La provincia andaluza se alza como una de las zonas más atractivas para el mercado inmobiliario y una de las más activas en materia de inversión en hoteles. Por su parte, las Islas Canarias acumulan una cifra de 146 millones, en línea con los 138 que registró el año pasado en el mismo periodo.
«La cifra de inversión del semestre refleja la inercia positiva con la que empezamos el año, sin embargo, somos muy cautos sobre las transacciones en curso por el impacto que está teniendo en las decisiones de los inversores, tanto la crisis de suministros que inició su escalada hace meses, como la subida de los tipos de interés. Nos encontramos ante la situación paradójica en la que los resultados turísticos van mejor de lo que esperábamos hace un año y sin embargo los inversores están adoptando, cada vez más, una posición a corto plazo de wait & see. Habrá que estar pendiente de cómo evolucionan las distintas variables después del verano para saber cómo termina un año que arrancó en plena forma, pero que comienza su segunda mitad con algún síntoma preocupante», comenta Laura Hernando, managing director de Hoteles en Colliers.
Radiografía de la inversión hotelera en España
El año arrancó con las mejores perspectivas posibles para la inversión hotelera. La fuerte recuperación de la demanda turística, el debilitamiento de los efectos de la pandemia y el elevado volumen de capital disponible para la inversión son algunas de las claves que definen aquel contexto.
El segundo semestre da el pistoletazo de salida con un pipeline de operaciones en curso por un valor aproximado de 1.800 millones de euros, pero la incertidumbre impulsada por la inversión de Ucrania, la subida en la factura de la luz y los costes de personal, además de la inflación en máximos y el aumento de los tipos de interés en el corto plazo, han vuelto a dibujar un escenario de incertidumbre que tendrá impacto directo en las cuentas de los hoteles.
¿Cómo es el perfil inversor? El inversor internacional ha dominado el mercado durante el primer semestre de 2022. Los compradores internacionales acaparan cerca del 60% de la inversión total. Destacan operaciones como la compra del Hotel 7Pines Ibiza Resort (Ibiza) por parte de Engel & Voukers Venture Management; la compra del Faranda Florida Norte (Madrid) por parte de Round Hill o la reciente compra del Princesa Plaza (también en Madrid) por parte de Brookfield.