Actualmente, el 17% de la oferta que hay en el mercado de España es vivienda heredada, que sus herederos han decidido sacar al mercado inmobiliario ya sea para vender la vivienda o para ponerla en alquiler. En general, el perfil del heredero con vivienda en el mercado es mayoritariamente un hombre de 54 años, según el estudio Análisis de las viviendas heredadas en España, elaborado por el portal inmobiliario Fotocasa Research.
Asimismo, el estudio destaca que, respecto a la evolución del perfil del heredero con vivienda en el mercado, cada vez está más presente el colectivo joven, especialmente el que tiene de 25 a 34 años, que ha pasado de representar el 8% en 2020 al 15% en 2023.
Al respecto, María Matos, directora de Estudios y portavoz de Fotocasa, ha señalado que «a pesar de que el perfil del heredero es senior, ya que sobrepasa los 50 años y se entiende que la mayoría de este colectivo ya es propietario a esta edad, es positivo que el colectivo joven aumente el porcentaje de heredar vivienda, ya que los jóvenes son quienes más dificultades tienen para acceder a una vivienda, y esta vía de aproximación puede suponer una solución para los menores de 35 años que buscan convertirse en propietarios».
La profesional advierte que «sin embargo, el impuesto de sucesiones es uno de los principales impedimentos para que los jóvenes, en la mayoría de los casos sin ahorros y con una situación laboral precaria, puedan hacer frente a los gastos de aceptar una vivienda heredada».
De igual forma, el estudio precisa que el perfil de heredero que vende o alquila un inmueble pertenece a un índice socioeconómico elevado. Cerca de 6 de cada 10 pertenecen a la clase alta o media alta y, si se incluye a la clase media, se obtiene más del 90% de los miembros de este colectivo.
En cuanto a la situación residencial, cerca de 7 de cada 10 herederos oferentes viven en pareja (28%) o con pareja e hijos (39%). Aunque es la situación vital dominante entre los herederos ofertantes de vivienda, han perdido peso en los últimos años a la par que han ganado los que viven solos, pasando de representar un 7% en 2020 a un 16% en 2023.
Por territorios, la Comunidad Valenciana continúa perdiendo peso dentro de los herederos oferentes (apenas llega al 9%, cuando en 2020 eran el 18%), mientras que Madrid, con un 26%, recupera los valores previos al bajón registrado en 2022, cuando cayó hasta el 13%.
Percepción de precios al alza
Por otro lado, el estudio subraya que la percepción de estos herederos, que ofrecen sus inmuebles para el alquiler o la compra, no difiere mucho de la que ofrecen el resto de ofertantes que actúan en el mercado, es mayor la percepción de que los precios son caros o muy caros en el mercado en propiedad (86%) que en el de alquiler (81%).
En cuanto a su evolución futura, más de seis de cada diez ofertantes de viviendas heredadas creen que los precios seguirán subiendo, un 62% de ellos en el caso de los inmuebles de compra y un 64% en el de los inmuebles de alquiler. En este último caso, el del arrendamiento, ese porcentaje supone un incremento notable con respecto al 54% de herederos oferentes que opinaban esto mismo en 2022.