La Socimi Castellana Properties ha comprado a Aliseda un edificio de oficinas de más de 4.600 metros cuadrado de superficie bruta alquilable. El inmueble, anexo al centro comercial Los Arcos, será transformado e integrado en el espacio comercial con una inversión de 15,6 millones de euros.
El plan de la compañía contempla dotar a Los Arcos de una nueva zona de ocio y restauración con doce nuevas marcas. Esto permitirá que el centro comercial «se mantenga a la vanguardia, incremente su mix comercial y se consolide como una de las referencias de la ciudad de Sevilla», explican desde Castellana Properties.
En concreto, se prevé que las obras se inicien a comienzos de 2022, mientras que a lo largo del primer semestre de 2023 se llevarán a cabo las primeras aperturas de los establecimientos.
Este proyecto complementa las recientes reformas y nuevas aperturas que se han llevado a cabo en Los Arcos. Pues en los últimos meses, en el centro comercial MediaMarkt ha abierto un establecimiento de 2.500 metros cuadrados, Mercadona otro de 3.500 m2 y la marca lusa Espaço Casa otro de 1.250 m², entre otras.
Desde finales de 2019, Castellana Properties ha destinado más de 24 millones de euros a la rehabilitación y remodelación de centros comerciales. Así, Julio García, director de Operaciones de la Socimi, asegura: “Queremos consolidar el posicionamiento de Los Arcos como el centro de comercial de referencia en Sevilla y provincia».
Inversión de 500 millones
La Socimi, con una cartera de 18 activos en España entre centros comerciales, parques comerciales y oficinas, mantiene su objetivo de alcanzar un volumen por encima de los 1.500 millones de euros de valor bruto.
Actualmente, el valor de su cartera roza los mil millones de euros (993,84 millones), con lo que aún dispone de 500 millones de euros para invertir en el próximo año, aunque por la pandemia puede ampliarse el plazo a un año y medio. En número de centros comerciales, según su consejero delegado, Alfonso Brunet, “depende del tamaño: pueden ser entre dos y seis”.
Entre abril y septiembre -su primer semestre fiscal-, Castellana Properties registró pérdidas de 18,9 millones de euros, frente a las ganancias de 33,8 millones registradas en el mismo periodo de 2019.
Se trata de unas pérdidas que la compañía justificó en el impacto de las bonificaciones en las rentas a sus inquilinos por un valor de 15 millones de euros durante su semestre fiscal. Desde la empresa estiman que este importe tuvo un impacto directo en los ingresos del 48%, cuya partida fue de 22,9 millones de euros.
