

La importancia que adquieren los criterios ESG, la agilidad administrativa y la inversión en el desarrollo urbanístico en la Comunidad de Madrid, fueron algunos de los ejes de conversación en el evento Desarrollos urbanos: desafíos de un nuevo Madrid, realizado por Women in Real Estate Spain (Wires), la asociación que reúne mujeres directivas, CEO y consejeras en el sector inmobiliario.
Durante el evento la asociación destacó que se esperan más de 260.000 viviendas en los nuevos desarrollos en la Comunidad y más de 100.000 viviendas solo en Madrid, casi el 50% de ellas con algún tipo de protección. Adicionalmente, estos desarrollos incluirán más de 14 millones de metros cuadrados de zonas verdes, el equivalente a once veces el parque del Retiro. Esto, se prevé, generará una población de más de medio millón de habitantes, con más de 22.000 millones de euros de inversión.
Lo anterior supone un gran desafío para Madrid, sus habitantes y para todo el sector. De allí que Mercedes Torrejón, directora de urbanismo de CREA Madrid Nuevo Norte, resaltará la necesidad de implementar una verdadera agilidad administrativa en el ámbito urbanístico. «El principal desafío para que los desarrollos urbanos sean una realidad en Madrid y en España, es contribuir a que puedan sobrevivir a los recursos. Todos conocemos la multitud de precedentes de planeamientos urbanísticos que han dado al traste por culpa de los recursos».
Puntualizó, además, que «en nuestro caso, al final tuvimos nueve recursos contra la aprobación definitiva de la modificación puntual del plan general. Estos nueve recursos desarrollaban 35 motivos de nulidad total del plan. De estimarse alguno de estos, hubiéramos tenido que volver al momento inicial, adaptar el plan y pasar de nuevo por una tramitación que duro más de dos años».
La sostenibilidad en el desarrollo urbanístico
Madrid Nuevo Norte, del cual Torrejón es directora de urbanismo, es una actuación de regeneración que nace de la necesidad de integrar en la ciudad la estación de Chamartín y todas las instalaciones ferroviarias que parten de ella, que han creado una brecha en el norte de la capital española. El proyecto incorpora una estrategia para alinearse con los principios de desarrollo sostenible de la agenda 2030, lo que ha hecho que su planeamiento desarrolle un modelo energético neutro en carbono. Además, este será el primer proyecto urbanístico en Europa en conseguir las certificaciones LEED y Breeam.
Precisamente, la sostenibilidad fue uno de los grandes ejes de discusión de la mesa redonda, teniendo en cuenta que a día de hoy es uno de los primeros puntos en la agenda de un inversor. De hecho, Esther Escapa, directora de adquisiciones y desarrollo en AXA, ha señalado que «las preocupaciones relacionadas con la sostenibilidad en el mundo inversor las ha habido desde hace mucho tiempo. Sin embargo, es desde 2018 hasta hoy, cuando vemos que éstas están más estructuradas, con parámetros claros de medición y objetivos cuantificables más que cualitativos».
No obstante, Marta Lora-Tamayo, directora de la cátedra UNED-Instituto Lincoln de Políticas de Suelo, ha destacado que la sostenibilidad no solo esta relacionada con la inclusión de zonas verdes y no puede limitarse al campo ambiental. «Hay que pensar en la sostenibilidad, también, en términos económicos y sociales, preguntarse ¿para un futuro ese desarrollo va a ser sostenible? ¿qué ayuntamiento va a ser capaz de mantener esas zonas verdes? Tenemos que hablar de un desarrollo sostenible integral y determinar si es económicamente viable».
Finalmente, Luis Cesteros, director del departamento de urbanismo de Tornos Abogados, ha recordado que la vivienda es un bien de primera necesidad que se ha convertido en un bien de inversión por parte de las administraciones públicas. «No solo las empresas privadas sufren los efectos de este modelo, sino que las propias administraciones deben de reflexionar sobre si la vía fiscal debería de focalizarse, no tanto en el proceso de un bien de primera necesidad, y quizá sí en otros sistemas», ha concluido.