QEV, la firma tecnológica participada por el histórico del inmobiliario Enrique Bañuelos, y Goodman, su socio final en este proyecto, se han quedado solos en una de las pugnas más sonadas de Barcelona y del sector logístico europeo: los terrenos de más de 500.000 metros cuadrados que hasta el 31 de diciembre pasado ocupó la Nissan.
El Consorci de la Zona Franca de Barcelona (CZFB) ha anunciado esta mañana que, una vez ha expirado el plazo de presentación de propuestas para el arrendamiento de los terrenos de su propiedad, que hasta el pasado 31 de diciembre ocupaba Nissan, tan sólo cuenta con una candidatura «que ha enviado la documentación requerida en tiempo y forma».
Fuentes del mercado han confirmado posteriormente que la única oferta ha sido la presentada por la alianza entre QEV y Goodman. Otros nombres que habían sonado iban desde Merlin con Mecalux a JLL con Condis. O incluso hubo un momento en que la china Great Wall Motors (GWM) parecía la mejor colocada.
En su momento, Goodman presentó ante la Comisión de Reindustrialización de Nissan un proyecto que incluía una inversión de 550 millones de euros y la creación de más de 3.200 empleos directos, aunque las especificaciones posteriores del concurso impedían este desarrollo logístico completo.
Por su parte, QEV Technologies proponía unos 200 millones de inversión que se sumarían a los 800 millones del Hub de Descarbonización de la Zona Franca de Barcelona para la puesta en marcha del proyecto Zeroid, de producción de vehículos eléctricos y por el que se generaría 1.000 puestos de trabajo directos en tres años y 6.000 empleos indirectos.
La producción de la nueva marca se iniciaría en 2023 y preveía fabricar 60.000 vehículos al año diseñados para el transporte de mercancías y de última milla.
En cualquier caso, ahora habrá que ver en qué consiste la oferta presentada. En principio, la Zona Franca pide en torno a 100 millones de euros por los terrenos, de los que sólo una quinta parte se pueden destinar a logística, que es el negocio de Goodman y por lo que su plan inicial no resultaba viable.
Por lo tanto, habrá que comprobar, cuando se desvelen los detalles del proyecto ganador, cómo encajará la idea de QEV de fabricación con la oferta logística de Goodman.
Volviendo al concurso en sí, el plazo de presentación de candidaturas ha finalizado este lunes a las 11 horas y a continuación, a las 12 horas, se ha reunido, en sesión privada, la mesa de contratación para calificar la documentación del sobre A relativa a la «documentación general y administrativa» y ha procedido a admitir la candidatura presentada.
La mesa de contratación se volverá a reunir el 4 de noviembre, coincidiendo con la apertura del sobre B (detalles del proyecto), y el 17 de noviembre, con la apertura del sobre C (oferta económica), antes de publicar una resolución definitiva. Dicha mesa de contratación está formada por un presidente, un secretario y siete miembros.
