La construcción siempre ha sido uno de los motores más importantes de la economía español, representando un total del 5% del PIB nacional, pero en los últimos años el sector ha tenido que afrontar un gran reto: la falta de mano de obra y la escasez de profesionales cualificados.
El 49% de las empresas constructoras en España prevé que la dificultad para contratar nuevos talentos tenga un impacto negativo en su actividad, según la Encuesta sobre la Actividad Empresarial (EBAE) del Banco de España, correspondiente al cuarto trimestre de 2022.
¿Las causas? Los expertos señalan la falta de relevo generacional, la necesidad de mayor diversidad e inclusión laboral, la alta siniestralidad de este sector y, muy especialmente, la escasez de trabajadores cualificados capaces de abordar las nuevas innovaciones y tecnologías que están llegando.
a pesar de que este año el desempleo en esta industria ha disminuido en 38.300 parados menos, tal y como muestra la última Encuesta trimestral de Población Activa (EPA) del INE, ante esta situación, el mercado laboral de la edificación aún tiene por delante un desafío clave en un contexto marcado por los fondos Next Generation.
Según la Confederación Nacional de la Construcción, el sector necesitaría captar 700.000 nuevos puestos de trabajo hasta 2026 para poder afrontar el aluvión de obras que se tienen que poner en marcha con las ayudas europeas.
Por esto, buscar estrategias que solucionen el problema se vuelve una prioridad urgente para las empresas. Los expertos de Sto, multinacional especializada en el desarrollo de sistemas de aislamiento térmico y materiales de construcción, proponen seis fórmulas:
- Modernizar la imagen del sector para captar talento
La construcción ha tomado una imagen tradicional, vinculada a rentas bajas, excesivo trabajo físico, inseguridad laboral o pocas oportunidades de desarrollo. Sin embargo, el sector trabaja por cambiar estos parámetros. Una de las iniciativas es establecer regulaciones estrictas en materia de seguridad, aumentos salariales, conciliación y flexibilidad.
El futuro habrá de reconducir la imagen del sector para ser capaz de atraer a nueva fuerza laboral, especialmente entre los más jóvenes y el ámbito femenino, poniendo en valor todos sus beneficios. - Fomentar la formación especializada
Los sistemas educativo y laboral deberán trabajar conjuntamente para adaptarse a las necesidades actuales del mercado, con el foco puesto en crear más oportunidades formativas especializadas en las diferentes vertientes de la construcción: arquitectura e ingeniería, fabricación, digitalización, control de calidades, producción de materiales de construcción, revisión presupuestaria, edificación, transporte, instalación…
La formación es el imán que permitirá esta captación de nuevos talentos cualificados, y ayudará a dar valor a una profesión creativa, práctica, técnica, sostenible, y con grandes oportunidades. - Crear entornos de trabajo más seguros
La construcción es el segundo sector con mayor número de accidentes laborales, según los últimos datos el Ministerio de Trabajo y Economía Social. El dato supone un hándicap que podría subsanarse incrementando la inversión y formación en medidas preventivas y entornos de trabajo más seguros y controlados. - Impulsar la industrialización
La construcción industrializada permite la fabricación en planta de parte, la mayoría o la totalidad de los elementos del edificio. Este formato, gracias a su apuesta tecnológica y proceso automatizado, supone una nueva forma de construir que está impulsando la captación de nueva mano de obra y la profesionalización exponencial de fuerza laboral.
Los motivos que impulsan el cambio son varios: minimiza los riesgos laborales, impulsa la formación especializada, capta la atención de fuerza laboral más joven y favorece e impulsa la inclusión y la conciliación. - Poner en valor su carácter innovador y tecnológico
La modernización y digitalización del sector es una realidad que se debe aprovechar para atraer nuevos perfiles como aplicación de sistemas de control digitales, BIM, realidad virtual y aumentada, Big Data, Internet of Things, Cloud Computing, productos y materiales revolucionarios… - Aumentar el uso de la automatización para reducir la dependencia de mano de obra humana
Mediante el uso de robots y drones que se encarguen de tareas peligrosas o repetitivas, como la perforación de agujeros o la colocación de vigas, se libera a los trabajadores de realizar estas tareas más complejas y de mayor valor añadido. En esta línea, la automatización puede mejorar la eficiencia y precisión de la construcción, además de reducir los costes y aumentar la productividad.
