RICS ha organizado en la sede de la consultora EY, en Madrid, un encuentro histórico entre los principales valoradores inmobiliarios y las compañías auditoras más importantes en el mercado español. Cerca de cien profesionales debatieron sobre los aprendizajes de anteriores crisis, la transformación digital y la necesidad de formar a los equipos especializándolos por tipología de activo.
En este marco, Silvia Damiano, directora de valoraciones de JLL para el sur de Europa, destacó la necesidad de trabajar de forma transversal para superar las expectativas de los clientes: «desde JLL trabajamos con el objetivo de que los nuestros especialistas en cada segmento aporten lo mejor de su área de conocimiento a las valoraciones de los inmuebles de los clientes».
Por su parte, Fernando Fuente, director nacional de Valoración de CBRE, destacó los avances de la práctica de valoración en España durante los últimos 5 años, remarcando que aún existen retos importantes que afrontar en la profesión para poder generar una mayor confianza al mercado de inversores y financiadores. En su opinión, «sería necesario poder invertir más tiempo en hacer trabajos de comprobación. La tecnología nos está ayudando a mejorar en este sentido».
También el director general de Savills Valoraciones y Tasaciones, Jesús Mateo, explicó la gran ayuda que supone para su equipo pertenecer a una compañía internacional con presencia local en 20 países a lo largo de Europa, una perspectiva que ayuda a mejorar el entendimiento de qué ha sucedido en mercados maduros frente a lo que hoy en día está sucediendo en la aparición de incipientes asset class en España, tomando como ejemplos -a fecha de hoy- el coliving o senior housing y con anterioridad el PRS o BTR. En este sentido, señala que «para determinadas tipologías el entendimiento del mercado es fundamental al saber qué ha sucedido en otros países, porque nos puede ayudar a anticipar probablemente cómo evolucionará en España».
Diego Vilaró, director de Advisory Services de Gesvalt, señaló la importancia de evaluar el impacto de la regulación en materia ESG, cada vez más exigente, en el mercado inmobiliario desde una perspectiva global: «desde Gesvalt tratamos la Sostenibilidad de manera integral, empezando por el análisis del ciclo de vida de la actividad económica concreta que realizan nuestros clientes, y detectando los riesgos que asumen en cuestiones ambientales, sociales y de gobernanza, lo que nos permite elaborar conjuntamente las políticas encaminadas a mitigar dichos riesgos, y establecer los KPIs adecuados para su seguimiento».
Fernando González Cuervo, socio responsable de los sectores Construcción e Infraestructuras de EY en el área EMEIA, abordó la importancia que tiene incorporar especialistas para poder anticipar riesgos y proponer soluciones concretas trabajando junto con el cliente y el valorador: «la revisión de las metodologías de valoración de los distintos tipos de activos inmobiliarios implican un conocimiento especializado de la legislación local y los calendarios de gestión necesarios, por lo que auditores y valoradores debemos trabajar conjuntamente para ayudar a nuestros clientes».
En representación de Deloitte, Ignacio Alcaraz, socio responsable del sector de Construcción y Concesiones, puso de manifiesto la necesidad de ponerse de acuerdo respecto las asunciones especiales que hacen los valoradores inmobiliarios, comentando lo sucedido durante la crisis financiera y también durante la crisis del COVID-19: «las cláusulas de incertidumbre material son de gran ayuda, pero deben aplicarse de una forma homogénea en todos los casos«.
Enrique Domínguez Pérez, socio de Auditoría de KPMG, explicó los grandes avances experimentados en los modelos de valoración de las grandes carteras de inmuebles. En este punto, el representante de KMPG recuerda que «todavía se puede mejorar en el desarrollo de estos modelos para las distintas tipologías de activos aprovechando la digitalización». Sin embargo, el experto cree que «estamos en el buen camino».
Por último, el socio responsable de Auditoría de PwC para los sectores de Construcción, servicios y Real Estate, Rafael Pérez Guerra, señaló la necesidad de algunas compañías auditoras, que deben invertir en tecnología para poder revisar mejor el trabajo de detalle que lleva a cabo el valorador: «Los calendarios de trabajo muchas veces no conviven bien con el tamaño de las carteras inmobiliarias de nuestros clientes. La tecnología debe ser nuestro mejor aliado».
