La promotora Locare promoverá vivienda dotacional en Alcobendas (Madrid), en la mayor colaboración público-privada entre el sector inmobiliario y una administración pública.
Locare como promotor y Tectum como patrimonialista, de la mano de la consultora en el sector residencial en alquiler asequible Arenhos, liderada por la exdirectora de inversiones de Locare, Alejandra Mora Gallego; presentaron, en 2018, ante el Ayuntamiento de Alcobendas, una iniciativa privada para dar salida a un suelo dotacional en desuso en el Consistorio.
Según la documentación a la que ha tenido acceso Brainsre.news, las nuevas 383 viviendas dotacionales se comercializarán en régimen de alquiler. Se promoverán sobre las parcelas S2 y D3 del sector Casablanca.
La obra se concebirá como una obra pública y ha sido aprobada por el pleno del Ayuntamiento de Alcobendas, hasta en dos ocasiones. La propuesta se votó a favor por unanimidad, con el acuerdo entre PP, Vox, Ciudadanos, PSOE y Podemos.
La gran novedad que supondrá la promoción de estos alojamientos es la puesta en el mercado del alquiler de unas unidades a un precio del 60% por debajo del mercado y un 25% por debajo de la vivienda protegida. Esto supone alquilar a 5,6 euros por metro cuadrado al mes.
Locare y Tectum invertirán más de 40 millones
Locare y Tectum invertirán más de 40 millones en la promoción, en un contrato valorado en 66,5 millones, que incluye la valoración del suelo, situada en más de 15 millones. Tectum recibirá una rentabilidad anual del 3,8%-4%, a través de la explotación del activo.
Ahora, a falta del visto bueno, la Mesa de Contratación del Ayuntamiento ha decidido solicitar a los Servicios Técnicos Municipales la emisión de un informe relativo a la documentación técnica entregado por Locare. Después, la promotora deberá contar con la aprobación de esa mesa del Consistorio para poder seguir adelante con su plan.
Una vez promovido y operativo el inmueble, como se indica en la Ley de Obras Públicas, Tectum deberá mantenerse como patrimonialista al menos una quinta parte del contrato, es decir, un mínimo de 8 años.
Propuesta para el mercado del alquiler
La propuesta que, aparentemente, llegará a buen puerto supone una revolución para el mercado del alquiler residencial, sobre todo en aquellas zonas y municipios donde su coste impide a muchos ciudadanos contar con una vivienda.
En el caso concreto de Alcobendas, el alquiler medio se sitúa en 14,2 euros por metro cuadrado al mes, según la plataforma de Big Data inmobiliario de Brains Real Estate. Esto supone un 30% más que en 2015. Alquilar un inmueble de una habitación cuesta de media 880 euros, lo que supone inaccesible para los jóvenes de la localidad.
Precisamente, en los pliegos, el Ayuntamiento de Alcobendas concibe que el proyecto estará «destinado a cubrir las necesidades de alojamiento de las personas y colectivos más desprotegidos, de menores recursos y especialmente necesitados (jóvenes, mayores, estudiantes, familias monoparentales…)». Además, inciden en que serán rotativos y serán utilizados por los inquilinos de forma temporal; los usuarios podrán estar 3 años en las unidades, prorrogables por otros 3.
Mientras el precio medio de una vivienda de dos dormitorios es de más de 1.300 euros, Locare y Tectum pondrán en el mercado un producto nuevo a 650 euros.
Modelo de colaboración público-privada
Fuentes próximas a la operación señalan que esto es solo el principio. La intención de Locare y Tectum es exportar este modelo a localidades donde el mercado del alquiler muestre una situación similar a la de Alcobendas, es decir, que los precios sean inaccesibles para jóvenes y familias. Para ello, solicitarán a las administraciones públicas la cesión de suelos residenciales o dotacionales en desuso que poder explotar.
4 años ha hecho falta en esta ocasión, reuniones con el Ayuntamiento y con la Comunidad de Madrid. Una vez logrado, los estudios legales ya realizados permitirán acelerar el modelo.
La pasada semana, el propio Andrés Horcajada, CEO de Tectum y propulsor de este acuerdo, denunciaba en un evento inmobiliario la falta de oferta de vivienda en alquiler, la cual cifraba en 1 millón de hogares a nivel nacional, 250.000 de ellos en Madrid. Adicionalmente, señaló que el 50% de los alquileres tienen una tasa de esfuerzo para el pago de las rentas superior al 40%.
Sus críticas al actual sistema no acababan ahí, sino que reclamó ayudas públicas para la vivienda, al igual que las que se ofrecen a otros sectores como los carburantes o la luz.
