Este lunes, Intrum anunció la venta de gran parte de su cartera de activos tóxicos en Europa, un portfolio bautizado como ‘Proyecto Orange‘, a afiliados de Cerberus Capital Management. Se trata de una de las mayores operaciones en este mercado en el continente europeo.
Esta venta de activos propios es el gran movimiento de Intrum para reducir su deuda. El valor nominal de la cartera se sitúa en 382.000 millones de coronas suecas (aproximadamente 33.000 millones de euros), y el valor bruto contable, en torno a los 11.500 millones de coronas suecas (cerca de 960 millones de euros al cambio actual).
La venta se llevará a cabo al 98% del valor en libros, de forma que la transacción se realizará por valor de 8.200 millones de coronas suecas (711 millones de euros), reduciendo la deuda del grupo sueco hasta alcanzar la cifra de 50.700 millones de coronas suecas (aproximadamente 4.400 millones de euros).
La transferencia se realizará al cierre de la operación, que se prevé tenga lugar este primer semestre de año, según han avanzado distintos medios.
Las entidades que poseen estas carteras serán compradas por el inversor, de forma que el fondo de inversión estadounidense contará con una participación mayoritaria del 65%, e Intrum conservará una participación del 35%. Por su parte, el grupo sueco mantendrá durante mínimo cinco años el servicio de gestión de la totalidad de la cartera, sin posibilidad de que se produzcan cambios en las condiciones.
Los activos que incluye el denominado Proyecto Orange se distribuyen en 13 de las 20 jurisdicciones de Intrum en el continente europeo, y se reparten en cerca de 10.000 carteras, en su mayoría unsecured.
¿Otra de las puntas de lanza de la operación? Para Intrum, la transacción supone el primer paso significativo en su objetivo de convertirse en una plataforma de gestión de activos de servicio completo con capital mayoritario de terceros. Además, con este paso la marca también recorta considerablemente los activos tóxicos que tiene en balance.
La empresa también dijo que espera registrar una pérdida contable de 845 millones de coronas suecas debido a la transacción, destinada a ayudar a Intrum a hacer frente a sus vencimientos de deuda hasta 2025 sin tener que depender de los mercados, según informa Reuters.
Según ha declarado Andrés Rubio, consejero delegado de Intrum, «esta transacción es un paso importante que nos permitirá desapalancar nuestro balance, manteniendo la exposición al activo y el perímetro de servicio completo».
La operación, en este caso, ha contado con el asesoramiento pe PwC y Akin por prte de Intrum y con Linklaters y EY por parte de Cerberus. El comprador, además, ha firmado un acuerdo con Goldman Sachs para financiar la transacción.
En España, la marca acaba de reforzar su estructura interna con el nombramiento de Enrique Tellado, exCEO de Evo Banco, como director general interino. Además, la firma cerró en mayo de 2023 la compra de Haya Real Estate, también a Cerberus, por un importe de 136 millones, tras acordar una quita del 60%.