
¿Qué diferencias en las preferencias existen entre los perfiles más jóvenes y los más adultos? ¿Por qué las zonas periféricas vuelven al punto de mira en la búsqueda de vivienda? El equipo de Fotocasa Research ha despejado alguna de las x que están determinando el mercado inmobiliario en el último año con datos que reconocen el aumento del interés por esta clase de activos.
Los jóvenes, a las ciudades; los mayores, a la periferia
Si se analiza la demanda de vivienda según la edad, los cambios son significativos. Los compradores de vivienda menores de 45 años concentran sus compras en el extrarradio de las grandes ciudades y sus centros urbanos y las capitales de provincia. Por el contrario, los mayores de 45 años prefieren vivir en zonas rurales o cerca del mar.
Entre los más jóvenes, el anclaje por las ciudades sigue siendo una realidad y entre los más mayores, la periferia va ganando terreno. ¿A qué se debe? La interpretación que Fotocasa hace de estos datos conduce a los ciclos vitales de cada colectivo. El trabajo y la primera residencia son las prioridades desde la juventud hasta la madurez. Llegado este momento, entran en juego otras variables: segunda residencia, horizonte de jubilación, naturaleza y entornos tranquilos.
Quien se decanta por alquilar su vivienda, por otra parte, suele vivir alrededor de núcleos urbanos, como grandes ciudades y capitales de provincia. Entre los menores de 45 años, la situación aún es más intensa: el 41% de la población entre 18 y 24 busca vivienda en alquiler en capitales de provincia, casi la misma cifra que en la franja que va de los 25 a los 34 años, que registra un 41,1%. Como contrapunto, baja ligeramente el porcentaje de personas de entre 35 y 44 años que se decantan por vivir en estas zonas más cosmopolitas, con un 36,8%.
En grandes centros urbanos, el 28,4 % del grupo entre 18 y 24 años busca alquilar o ha alquilado en estos lugares. La cifra aumenta hasta el 32,3 % entre los 25 y 34 años, y luego disminuye al 26,2 % entre las personas con edades entre 35 y 44 años. La demanda de alquiler (sea efectiva o no) en zonas de costa o entornos rurales solo aumenta entre las personas de más de 45 años.
¿Por qué vuelve la periferia?
Quienes migran desde la ciudad al extrarradio suelen basar su decisión en la mejora de su calidad de vida, una tendencia especialmente notable entre los compradores del segmento living durante los últimos doce meses.

El 51% argumenta esta mudanza del gran núcleo urbano a zonas más apartadas en la «búsqueda de zonas más tranquilas». Otro 38% vincula el cambio de domicilio a sus propias aspiraciones a una «mayor calidad de vida»
Geografía de la demanda de vivienda
La ubicación de la demanda de vivienda responde mucho a fases vitales, además de particulariedades territoriales. Es lógico que la búsqueda de vivienda en la costa supere el 20 % en Cataluña y se sitúe entre el 5% y el 10 % en Madrid.

Cataluña y Madrid comparten un mayor protagonismo (con respecto a la media nacional) de demanda en el extrarradio de una gran urbe; algo muy razonable puesto que son las comunidades autónomas que albergan las dos mayores ciudades del país. Se trata, además, de las zonas que más desarrollos urbanísticos están experimentando.
En Andalucía y la Comunidad Valenciana también tienen un peso significativo las localizaciones costeras y las capitales de provincia, mientras que los grandes centros urbanos y su extrarradio no son capaces de atrar tanto interés por parte de los compradores de vivienda.