El 53% de los españoles que compraron una vivienda en los últimos doce meses negociaron el precio con el vendedor, según una encuesta realizada por Fotocasa en febrero de 2024. Este porcentaje refleja una disminución en los últimos años en el mercado inmobiliario nacional. La proporción de compradores que negocian el precio ha caído más de un punto en comparación con 2023, cuando fue del 54%, y ha disminuido tres puntos respecto a 2022, cuando alcanzó el 57%.
En cuanto a la oferta, los datos muestran la misma tendencia a la baja en la negociación. El porcentaje de vendedores dispuestos a negociar el precio ha bajado dos puntos en el último año, pasando del 60% en 2023 al 58% en 2024. Al comparar con 2022, se confirma esta evolución negativa, ya que en ese año el 65% de los vendedores aceptaba negociar el precio de una vivienda. Estos son algunos de los hallazgos principales del informe «Experiencia en compraventa en 2024», que analiza el comportamiento del mercado de compraventa y sus actores.
Sin embargo, pese a que ha disminuido el porcentaje de compradores que negocian, la efectividad de las negociaciones se mantiene igual: el 80% de los compradores que intentaron negociar lograron obtener una rebaja, manteniendo el mismo nivel que en 2023. En cuanto a los vendedores, el 91% de los que participaron en negociaciones reconocen haber cerrado la operación a un precio más bajo. Por otro lado, el porcentaje de vendedores que lograron incrementar el precio final aumentó del 6% en 2023 al 9% en 2024.
«El mercado inmobiliario español se encuentra en un momento de gran dinamismo. La gran demanda de vivienda, junto con un stock que se encuentra prácticamente congelado, está tirando de los precios claramente al alza. Esto se refleja también en el campo de la negociación: el desequilibrio entre oferta y demanda y la previsión de mayores subidas de precios está dejando a los compradores un margen de negociación cada vez más reducido. La presión en el mercado es tal que incluso se empiezan a generalizar fenómenos poco frecuentes anteriormente, como el hecho de que incremente el número de vendedores que logran subir el precio de una vivienda después de una negociación», explica María Matos, directora de Estudios y portavoz de Fotocasa.
Solo uno de cada cuatro compradores que negocian consigue una reducción de precio superior al 10%. En cuanto al margen de descuento alcanzado durante las negociaciones, en el caso de los compradores, solo el 23% logra reducir el precio de la vivienda en más de un 10%. En tres de cada cuatro negociaciones, el descuento es inferior a ese porcentaje. Desde la perspectiva de los vendedores, si se realiza una rebaja, en solo el 35% de los casos se logra una reducción superior al 10%, mientras que en dos de cada tres negociaciones la rebaja es menor. Estos porcentajes han permanecido muy similares al año anterior.
En cuanto al tiempo que toma alcanzar un acuerdo, hay una diferencia considerable entre compradores y vendedores. El 55% de los compradores que negociaron asegura que el ajuste de precio se logró en menos de un mes, un punto más que en la encuesta anterior. En cambio, solo el 32% de los vendedores pudo modificar las condiciones en ese plazo, con el resto necesitando más tiempo. No obstante, este porcentaje ha subido tres puntos respecto a la encuesta pasada.
La negociación sigue siendo la opción más común para llegar a un acuerdo en la compra de una vivienda. En el 43% de los casos, el precio se ajusta como la mejor forma de llegar a un consenso, un porcentaje que coincide tanto para compradores como para vendedores. En el caso de los compradores, este porcentaje ha subido un punto respecto a 2023, mientras que en el de los vendedores ha bajado tres puntos desde el 46% del año pasado.
Para los compradores, otros factores también influyen en la negociación del precio. El estado del inmueble fue señalado por el 27%, lo que representa un aumento de tres puntos en comparación con el año anterior. La urgencia de alguna de las partes involucradas afectó al 22%, aunque este dato ha bajado respecto al 26% de 2023. Además, el desajuste entre el precio y la realidad del mercado fue mencionado por el 21%, dos puntos más que en el año anterior.
Por parte de los vendedores, además de ajustar el precio como principal estrategia para cerrar la venta, otros factores también fueron clave para aceptar negociar una rebaja. Estos incluyen el estado de la propiedad (19%), la urgencia de alguna de las partes (16%) y la falta de interés en la vivienda (15%).
