La inversión inmobiliaria se hundió en la mayoría de los mercados de la región EMEA en el primer trimestre de 2023, continuando la tendencia de finales del año pasado. No obstante, los inversores esperan una subida en el segundo semestre a medida que la incertidumbre en torno a las condiciones financieras y macroeconómicas baje, según ha informado la consultora Colliers en su último informe ‘Capital Markets Snapshot’.
Las crisis bancarias en Europa y Estados Unidos agravaron las preocupaciones existentes en torno a la alta inflación, los incrementos de los tipos de interés, el débil crecimiento y los riesgos geopolíticos, lo que se tradujo en importantes caídas interanuales de la actividad inversora en los principales mercados entre enero y marzo. Los volúmenes bajaron en Francia y España más de un tercio en comparación con los tres primeros meses de 2022 y se desplomaron todavía más en Reino Unido e Italia. Alemania, por su parte, registró uno de sus trimestres de apertura más débiles en más de 10 años.
Luke Dawson, Head of Global and EMEA Capital Markets en Colliers, ha dicho que «las turbulencias en el sector bancario a principios de año mermaron la ya frágil confianza de los inversores, especialmente en Londres y otros mercados con una gran presencia financiera». «Contrarrestando este parón en la confianza, sectores específicos de algunos mercados siguieron registrando buenos resultados y, si la inflación sigue bajando y los tipos de interés se estabilizan, esperamos una reactivación de la actividad en el segundo semestre de 2023», ha añadido.
Estas perspectivas se fundamentan en la encuesta que la consultora realizó a inversores del sector inmobiliario en Mipim. El 63% de los encuestados estaban en posición compradora, lo que apunta a un optimismo generalizado en el sector inmobiliario. Damian Harrington, Head of Research en Colliers, ha comentado que «las transacciones siguen viéndose frenadas por una diferencia en las expectativas de precios entre compradores y vendedores, pero es probable que esta diferencia se reduzca a medida que se clarifiquen las condiciones del mercado y el coste de la financiación en los próximos meses».
También es probable que la subida de los tipos de interés y las políticas ESG actúen como catalizadores de las transacciones en los próximos meses. «Los inversores que se beneficiaron de los bajísimos tipos de interés vigentes hasta hace poco tendrán que refinanciarse a nuevos niveles más elevados, mientras otros tendrán que retirar gradualmente de sus carteras los activos que no cumplan las normas ESG«, ha indicado Harrington. «Esto les presionará para desprenderse de activos, lo que creará una importante oportunidad para los compradores, sobre todo para los que dispongan de liquidez inmediata», ha apuntado.
Pese al retroceso anual, los volúmenes de inversión en España en el primer trimestre superaron las expectativas, impulsados por dos importantes operaciones residenciales y una gran transacción en el mercado de oficinas. El interés sostenido de los inversores también es evidente en las oficinas de grado A que cumplen las normas ESG en los distritos de negocios de Madrid y Barcelona, y en los activos hoteleros, que están respaldados por la recuperación del turismo y por los buenos resultados operativos de los hoteles.