En entrevista con Brainsre, Gonzalo Carpintero, CEO de Livensa Living, empresa de residencias universitarias, residencias de estudiantes y alojamientos flexibles en España y Portugal; analiza la evolución de este sector del mercado en nuestro país, así como las previsiones para el próximo año y los principales desafíos a los que se enfrenta.
Actualmente, Livensa Living se encuentra enfocada en seguir maximizando los ingresos y los márgenes del portfolio operativo, pues tomando como referencia el año académico 2022-2023, que terminó en agosto del ejercicio en curso, la compañía ha duplicado los ingresos. «Si hablamos con respecto al año académico 2023-2024, tenemos unas perspectivas muy buenas, con todas las residencias prácticamente llenas y unos ingresos un 15% superiores al último año», señala el CEO.
De igual forma, dentro de la nueva fase de madurez que enfrenta la compañía, Livensa se está centrando en invertir en sistemas para mejorar la eficiencia de sus equipos comerciales y de operaciones. Con respecto a la parte de crecimiento, la compañía dispone de un plan trazado para doblar su tamaño para el año 2028, mediante la firma de nuevas adquisiciones y también con la incorporación a su portfolio de activos de alta calidad en gestión para terceros.
Ciudades protagonistas
«Somos conscientes de que la situación de los mercados financieros se ha complicado como consecuencia de la subida general de tipos y de la inestabilidad creciente en Oriente próximo, pero seguimos siendo una compañía inversora y seguimos contando con el respaldo de nuestro accionista para seguir consumando adquisiciones que cumplan con los criterios estratégicos acordados», indica Carpintero.
Y es que el sector de los alojamientos flexibles se afianza cada vez más en el mercado español. Por esto, el concepto de alojamiento de Livensa Living Studios está concebido para responder a las necesidades de viajeros de negocios, ocio o estudios en estancias de larga, media o corta duración. «Basado en los principios de comodidad, conveniencia y estilo, Livensa está contribuyendo a evolucionar la experiencia de disfrutar, conocer y vivir ciudades como Madrid, San Sebastián, Málaga, Bilbao y Valencia«, destaca el profesional.
Estos espacios dispuestos por la compañía, caracterizados por su multifuncionalidad, se encuentran totalmente equipados, sin sobrecostes y con acceso a las instalaciones y servicios incluidos en estos entornos, incluyendo luz, agua, gas, wifi, limpieza y vigilancia. Además, cuentan con amplias zonas comunes, hasta espacios de coworking, gimnasio, sala de cine, salas de música, zonas de ocio o entornos exteriores ajardinados.
Un concepto con una mayor demanda, a nivel España, en Madrid, Barcelona, Málaga y Valencia. «De hecho, en Barcelona contamos ya con un pipeline de cerca de 1.000 camas en desarrollo y esperamos materializar oportunidades concretas en estas localizaciones en los próximos años», apunta el CEO de la compañía.
«No competimos con los hoteles ni tampoco con el mercado residencial»
Sin duda, este es un sector del inmobiliario que crece con fuerza, pero que también se enfrenta a desafíos como la necesidad de clarificar el marco legal existente de los alojamientos flexibles en cada comunidad autónoma para poder operar en este ámbito de forma establecida.
«Actualmente, la normativa nos obliga a tener calificación hotelera, pero no somos un producto hotelero. De hecho, no competimos con los hoteles ni tampoco con el mercado residencial. Damos una solución alojativa a personas que necesitan un lugar con buena ubicación, espacios multifuncionales y que les proporcione la posibilidad de socializar durante un periodo de tiempo determinado, ya sea por razones laborales, académicas, personales o de ocio, pero que no tienen vocación de permanencia», advierte Carpintero.
Quien, además, señala que, con el mercado actual, otro de los desafíos es «mantener una mente abierta» para poder adaptarse a las demandas, que son cada vez mayores y para lo que es necesario tener una gran capacidad de adaptación. Fundamental, teniendo en cuenta que la compañía se encuentra prácticamente llena en la mayoría de sus activos, aunque, no puede hablarse en términos absolutos ni por año completo, ya que en las residencias de estudiantes algunos reservan por meses, otros por semestre, otros por año académico y también por año completo.
Incremento de demanda de residencias
No obstante, el aumento del número de estudiantes y las experiencias internacionales en los últimos años ha provocado un incremento de demanda importante de residencias para la que no había respuesta. «España seguirá estando en tasas de camas por alumno por debajo de las economías comparables, al menos, durante los próximos tres años y eso genera unas perspectivas muy positivas. Al mismo tiempo, creemos que los estudiantes demandan cada vez más calidad y servicios a la hora de alojarse (zonas de estudio, piscina, gimnasio), así como experimentar la vida en comunidad, y creemos que el sector residencial no cubre estas necesidades de manera satisfactoria», reflexiona el CEO.
Respecto a los alojamientos flexibles, el panorama es más dinámico, lo que a su vez origina oportunidades de incrementos de ingresos muy interesantes. «En nuestros activos destinados al flex living estamos igualmente satisfechos con la evolución del negocio y con la acogida de nuestros, cada vez más numerosos, clientes». Precisamente, en concordancia con este aumento de usuarios, la compañía enfoca sus intenciones de crecimiento en las principales ciudades universitarias de España, Portugal e Italia, los tres países de Europa occidental con menor tasa de cobertura de camas.
Finalmente, Carpintero concluye puntualizando que el negocio del flex living será el que aglutine la mayor parte de las oportunidades de crecimiento, debido a la mayor disponibilidad de suelo para este tipo de activo. «Ciudades como Madrid, Barcelona, Lisboa, Málaga o Valencia son destinos con muy buenas perspectivas en este sentido».