Millenium Hospitality Real Estate (MHRE), socimi especializada en el sector hotelero de lujo en España y Portugal, ha presentado un plan estratégico para los ejercicios 2024-2027, en el que se incluyen como objetivos la retribución al accionista a partir de 2025, así como llegar a 2027 duplicando los ingresos y cuadriplicando el ebitda registrado en 2023.
Para ello, la compañía actuará en una doble dirección: por un lado, tratará de impulsar los ingresos a través de estabilización de los hoteles actualmente en operación y de la pronta apertura de los activos que se encuentran en reconversión, con el objetivo de que la totalidad de la cartera esté en operación en el primer trimestre de 2026.
Por otro lado, considera prioritario una simplificación de la estructura organizativa, con el fin de reducir costes, mejorando la eficiencia operativa y, todo ello, manteniendo la solidez del balance. Para conseguir estos objetivos, MHRE aplicará una rigurosa política de inversión y de desinversión de proyectos, con un claro foco en la rentabilidad presente y esperada de los activos. Para ello, la compañía ha clasificado los activos del portfolio actual en estratégicos y oportunistas llevando a cabo el desarrollo y explotación de los estratégicos y disponiendo, si fuera preciso, de aquellos oportunistas.
De acuerdo con el plan, son oportunistas: El Palmar, los Palacetes de Córdoba y, dentro del proyecto de Alcaidesa, las branded residences y la parcela R1H1. Las nuevas inversiones que podría realizar la sociedad deberán tener un umbral de rentabilidad en el entorno del 6% sobre coste de adquisición y serán proyectos de corta maduración, es decir, cuyas obras de reposicionamiento no superen los doce meses, con el fin de que contribuyan a los ingresos lo antes posible.
Se priorizarán las zonas urbanas, con alta demanda de turistas de calidad y, por ende, de cadenas hoteleras internacionales que operen en el segmento cinco estrellas y que quieran aumentar o tener más presencia en las mismas, como son Madrid, Barcelona, Valencia, Palma de Mallorca, Málaga y, fuera de España, por el momento, Lisboa. Además, se mantendrá la estructura de contrato actual, basado en una renta variable con un mínimo garantizado, ya que permite acomodarse a los distintos momentos del ciclo económico.
La sostenibilidad será el pilar transversal de la estrategia de MHRE en los próximos años, con el objetivo de ser una referencia de sostenibilidad dentro del mercado inmobiliario español. Por ello, la compañía mantiene como objetivo frente a la ‘E’, que el 100% de la cartera cuente con un certificado Leed Oro o superior y certificación energética ‘A’ en los activos reposicionados. Con respecto a la ‘S’, seguirá apostando por medidas que contribuyan al desarrollo local, promoviendo un empleo de calidad y contribuyendo a la riqueza del patrimonio cultural, favoreciendo la diversidad e igualdad de oportunidades, así como apostar por la formación y desarrollo del talento. Por último, en lo que respecta a la ‘G’, seguirá reforzando el gobierno corporativo, porque cree firmemente que un gobierno corporativo fuerte es la clave de la sostenibilidad de un proyecto. Por último, y no menos importante, la sociedad aspira a incorporarse al Mercado Continuo, con el fin de mejorar la liquidez y la visibilidad del valor en Bolsa.
En palabras de Luis Basagoiti, presidente ejecutivo de la sociedad: «El plan presentado hoy tiene como único fin la creación de valor para los accionistas, y se centra en un crecimiento eficiente y rentable, un balance sólido y una gestión prudente. La rentabilidad para el accionista es por tanto la prioridad, ante todo de la sociedad para los próximos años».
La presentación del Plan Estratégico coincide con la celebración de la Junta General de Accionistas de 2024, que ha terminado con la aprobación de todos los acuerdos propuestos por el Consejo de Administración de la sociedad, entre los que se encuentran, además de la aprobación de las cuentas anuales de 2023 y la ratificación del nombramiento de dos nuevos consejeros, Pablo Castellano, en representación de Alazady España, y Ricardo de Armas, como consejero dominical en representación de Castlelake, un contundente respaldo a la gestión del Consejo de Administración de la sociedad.