La huella de carbono es el conjunto de emisiones atmosféricas generadas por una persona, una organización, una ciudad, un producto o servicio, etc. En función del alcance que se le dé a la medición esta huella puede limitarse al proceso de fabricación, al transporte, a la extracción de materiales, a la fase de utilización, al proceso de reciclaje al final de su vida útil, etc. Todo dependerá de dónde queramos comenzar y finalizar su medición.
En concreto, la huella de carbono de un edificio es la cantidad total de gases de efecto invernadero que se generan a lo largo de su ciclo de vida y que por tanto incluye las emisiones asociadas al propio diseño del edificio, las generadas por la extracción, fabricación y transporte y de los materiales de construcción, el consumo de energía del edificio durante su operación y las emisiones derivadas de la fase de demolición al final de su vida útil.
Para calcular la huella de carbono de los proyectos de construcción en ClimateTrade empleamos un software desarrollado por el iTEC (Instituto Tecnológico de la Construcción) que dentro del análisis del ciclo de vida del inmueble tiene un módulo específico de huella de carbono.
El conocimiento y la cuantificación de la huella de carbono permite desarrollar iniciativas y estrategias para reducirla reduciendo así el impacto sobre el medio ambiente. Identificando cuáles son las principales fuentes emisoras y su potencial de reducción se podrán tomar mejores decisiones en la adquisición de materiales y servicios que redunden en un inmueble con menor huella de carbono.
¿Cómo funciona la compensación de la huella de carbono de los edificios?
Se habla cada vez más de sostenibilidad y de transición hacia Net Zero, pero ¿qué significa esto para el sector inmobiliario?
Tal y como en otros sectores, los inversores inmobiliarios ya están pensando en los riesgos climáticos de sus carteras de activos, e intentando alinearlas con sus objetivos ESG. Esta presión está llevando a los gestores de estos edificios a incorporar medidas en cada etapa del ciclo de vida de sus inmuebles, desde la diligencia debida hasta las adquisiciones y los arrendamientos.
Una vez calculada la huella de carbono de un edificio la estrategia correcta es el desarrollo de iniciativas y proyectos que permitan reducirla. Actuaciones de eficiencia energética, adquisición de energía de origen renovable o sustitución de combustibles fósiles por otros menos emisores pueden ser ejemplos de estas actuaciones. Pero estas estrategias de reducción son limitadas y llegará un momento en que acometerlas no sea sostenible a nivel económico y la escasa reducción de huella de carbono no justifique tales inversiones. Por ello es aquí donde se plantea la compensación de emisiones.
La compensación de carbono consiste en comprar créditos de carbono de proyectos de compensación que o bien absorben emisiones ya generadas y que se encuentran ya en la atmósfera o bien evitan emisiones que se hubiesen producido si ese proyecto no hubiésemos existido. Para alcanzar la neutralidad en carbono, una empresa tiene que comprar tantos créditos de carbono como el total de emisiones que no consigue reducir de otra forma.
Compensar las emisiones de forma transparente
El sector inmobiliario es uno de los más difíciles de descarbonizar en la actualidad debido a la dificultad que puede traer asociado el cálculo de las distintas fases de la vida de un inmueble así como la elevada contaminación asociada a los materiales que se utilizan en el sector. Por esa razón, no es posible llegar a la neutralidad en carbono solo con medidas de reducción: es necesario compensar parte de las emisiones.
En el proceso de compensación, dos aspectos son cruciales: la calidad de los créditos de carbono, y la transparencia de la transacción. Para el primer aspecto, es importante seleccionar créditos certificados por estándares nacionales o internacionales como Gold Standard o Verra, y asegurarse del alineamiento del proyecto con los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Climetetrade es una entidad tecnológica que aplica la tecnología blockchain al mundo de la compensación logrando el nivel de trazabilidad definitivo en estas operaciones.
A nivel de transparencia, el uso de tecnologías como el blockchain, que permite trazar todas las transacciones y evitar cualquier tipo de fraude, es recomendable. Esta trazabilidad le da al propietario, operador o inversor la seguridad de saber que su dinero realmente está generando un impacto positivo para el planeta, y le permite comunicar con confianza con sus grupos de interés.
«Somos conscientes de la importancia de ofrecer este servicio de calidad a aquellas entidades que se fijen objetivos de descarbonización y quieran aumentar su competitividad y añadir valor a su actividad. Por ello trabajamos para ayudar a las organizaciones a calcular su huella de carbono a través de diferentes soluciones y calculadores y, posteriormente, les ofrecemos compensar las emisiones a través de proyectos con las mejores garantías», mantiene Cristina Tarazona, especializada en el cálculo y compensación de emisiones en el sector de la construcción de ClimateTrade.
Tal y como señala Cristina, «para el año 2030 España pretende reducir sus emisiones al menos un 23% respecto del año 1990 y alcanzar la neutralidad (emisiones nulas) en 2050. Además, a partir de 2027 los nuevos edificios ocupados o propiedad de autoridades públicas deben ser neutros en carbono y a partir de 2030 esta neutralidad se extenderá a todos los edificios nuevos. Teniendo en cuenta que los edificios suponen un 36% de las emisiones de gases en Europa es necesario iniciar una encarecida descarbonización del sector en todas sus fases. Solo así podremos estar a la altura de los objetivos establecidos y contribuir a la lucha contra el cambio climático, tan necesaria actualmente en todos los sectores y mercados».
Acerca de ClimateTrade
ClimateTrade es un proveedor de soluciones climáticas pioneras basadas en blockchain, que facilita la descarbonización a gran escala a través de la innovación continua. En su marketplace, las empresas pueden comprar créditos de carbono, plástico y biodiversidad, certificados de energía renovable o iRECs (International Renewable Energy Certificates) de más de 80 proyectos certificados en más de 30 países, compensando su impacto climático de forma transparente y eficiente.
Los proyectos disponibles incluyen soluciones basadas en la naturaleza, energía renovable, reforestación y más, y todos están alineados con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas. La tecnología blockchain trae un valor añadido único, garantizando transparencia, trazabilidad, rapidez y bajos costes en todas las transacciones, así como una experiencia de usuario revolucionaria.
La API, el Widget y el Whitelabel de ClimateTrade permiten a los clientes integrar las funcionalidades del marketplace en su propia plataforma, calculando automáticamente la huella de carbono de productos o servicios y ofreciendo a los compradores la opción de compensarla en el proceso de pago. Estas soluciones apoyan la descarbonización de las emisiones del alcance tres y la estrategia net cero de los clientes.
Al compensar la huella de carbono con las soluciones de ClimateTrade, se recibe un certificado personalizado con información sobre la fuente de los créditos de carbono, y una clave blockchain para la trazabilidad de la transacción, facilitando el reporte en materia de sostenibilidad y ESG.
ClimateTrade ha permitido la compensación de más de 3 millones de toneladas de CO2, y lidera la digitalización del mercado de carbono.
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