

El volumen de inversión logística durante el segundo trimestre de 2021 alcanzó los 1.382 millones de euros, lo que supone un aumento del 750% respecto al periodo enero-marzo de este año. Este incremento se debe principalmente al cierre de la mayor operación logística de los últimos ejercicios, la compra de la macrocartera logística de Montepino por parte de Bankinter, según un informe de la consultora JLL.
Además, las compras de suelo superaron los 119 millones entre abril y junio, un 377% más.
Por tipología de inversor, la banca privada y el capital nacional lideraron la inversión logística durante el segundo trimestre, debido al gran volumen de la citada operación de Montepino. No obstante, si excluimos esta transacción, los fondos siguieron siendo los más activos del mercado y protagonizaron las principales operaciones, así como el capital internacional.
Respecto al segundo trimestre de 2020, cuando únicamente se contabilizaron 49 millones de euros transaccionados por el parón de la actividad económica a causa de la pandemia de coronavirus, la inversión logística se incrementó un 2.733%.
Las rentabilidades, en niveles muy bajos
El interés inversor por la logística sigue siendo muy fuerte como resultado de la resiliencia mostrada en tiempos de pandemia y con el comercio electrónico como palanca principal, explican desde JLL.
Este apetito continuó comprimiendo las rentabilidades hasta situarse en los niveles más bajos registrados por el sector. Así, las rentabilidades ‘prime’ se situaron en el segundo trimestre en un 4,15% en Madrid y un 4,1% en Barcelona.
Caída de la contratación en Madrid y Barcelona
Por otro lado, la contratación logística en Madrid se situó en los 207.400 m2 entre abril y junio de 2021, lo que supone una caída del 50% respecto a los tres primeros meses del año, cuando se produjo una importante operación ocupándose 86.000 m2 por Grupo Carreras. No obstante, respecto al segundo trimestre de 2020, la contratación subió un 103%.
En cuanto a Barcelona, la contratación se situó en los 212.500 m2, un 17% menos que en el primer trimestre de este año, pero un 200% más que entre abril y junio de 2020.
La tasa de disponibilidad, por su parte, aumentó en ambas ciudades con respecto al trimestre anterior, hasta alcanzar el 8,46% en Madrid y el 2,33% en Barcelona.
Previsiones
JLL espera una mayor compresión de las rentabilidades a lo largo del año, que siga la creciente demanda en torno a la logística urbana y el producto de última milla, así como por naves ‘big-box’ y ‘cross-docking’.
Además, para 2021 y 2022, la consultora prevé que se añadan al mercado 808.600 m2 en Madrid y 377.000 en Barcelona de nuevo producto logístico en construcción.
Por último, espera que la presión sobre los alquileres, que han subido interanualmente un 3 y un 4,5% en Barcelona y Madrid, respectivamente, persista a lo largo de 2021, ya que se estima que la penetración del comercio electrónico se incremente todavía más.