La principal conclusión del informe sobre ‘El Mercado Residencial & Inversor Local. Implicaciones del Covid-19”’ elaborado por Servihabitat Trends, señala que el mercado inmobiliario español, «mucho más sólido y saneado que en períodos de crisis anteriores como la del 2008 y reforzándose como un valor seguro para el perfil inversor, soportará con mayor firmeza» el fuerte impacto de la crisis sanitaria.
Aún así, con un ritmo de crecimiento del 3,2% en el primer trimestre, la previsión es que el precio de la vivienda muestre un descenso del 5,7% a cierre de año y que empiece a recuperarse de forma progresiva en 2021, con porcentajes del -3,3%.
Iheb Nafaa, consejero delegado de Servihabitat, asegura que desde que se avanzó en el plan de desescalada “hemos percibido que la recuperación se está produciendo a un ritmo más rápido de lo que cabría esperar después del fuerte impacto sufrido en los últimos meses. El mercado residencial, el de alquiler y el logístico pueden ser los menos impactados y los que más rápido recuperen ratios de normalidad, aunque los tiempos de esa recuperación vendrán muy marcados según las zonas y tipologías de producto”.
Por su parte, Juan Carlos Álvarez, director general de Negocio de Gestión Patrimonial de Servihabitat, indica que este contexto provocado por la crisis sanitaria ha ayudado a que el sector “se consolide como valor refugio para el inversor” gracias a la estabilidad que presenta, que “está siendo clave para atraer a los inversores que buscan buenas rentabilidades, pero con bajo riesgo”.
El precio descenderá un 5,7% en 2020, y un 3,3% en 2021
A pesar de estar «frente a un mercado mucho más saneado, empresas más sólidas y con planes de crecimiento sostenibles a largo plazo», según la firma, esta reconoce que los precios se verán afectados en los dos próximos ejercicios. Con un ritmo de crecimiento del 3,2% en el primer trimestre, la previsión es que el precio de la vivienda muestre un descenso del 5,7% a cierre de año y que empiece a recuperarse de forma progresiva en 2021, con porcentajes del -3,3%, explican desde Servihabitat.
Por tipologías, la obra nueva, con menos oferta en el mercado, mostrará una menor caída en los precios que las viviendas de segunda mano, e iniciará su recuperación unos meses antes.
Una caída del 26% en las compraventas
Las compraventas son el indicador que más afectado se va a ver tras la crisis sanitaria. Después de tres meses casi en blanco debido al decreto del estado de alarma, Servihabitat prevé que este año finalice con un total de 420.000 transacciones, lo que supone un descenso del 26% respecto a los datos alcanzados en 2019. En el 2021 se espera que esta cifra se recupere, alcanzando las 503.000 operaciones, según sus previsiones. Aun así, vale la pena destacar que en 2020 se han mantenido mensualmente, exceptuando los meses de estado de alarma, unos buenos ritmos similares a los registrados en 2017.
La opinión de la Red de agentes colaboradores (APIs) de Servihabitat también muestra una tendencia bajista en este indicador. Aun así, los resultados de la encuesta realizada a los APIs en junio muestran que un mayor porcentaje de APIs considera que las operaciones crecerán en los próximos seis meses. Esto se debe a la recuperación de las compraventas que durante estos últimos meses han quedado paralizadas por aspectos administrativos.
Las viviendas iniciadas descenderán un 20%
Servihabitat calcula que la oferta, tanto de viviendas iniciadas como de viviendas terminadas, desacelera en 2020 respecto a los niveles conseguidos el año anterior, cuando ya se registró un incremento porcentual menor que en 2017 y 2018.
Así pues, para 2020 se espera que las viviendas iniciadas desciendan un 20%, hasta los 86.000 proyectos iniciados, mientras que las terminadas decrecerán solo un 12%, con unos 62.000 proyectos, ya que después del estado de alarma se ha podido seguir con la promoción. Para el año siguiente, se mantendrán unos niveles similares, con casi 85.000 viviendas iniciadas, y unos 75.000 proyectos terminados.
La tipología de los activos buscados por los compradores ha experimentado un claro cambio de tendencia. El confinamiento ha provocado que más del 40% de la demanda solicite viviendas más grandes y que cuenten con terrazas, jardines y balcones. En este sentido, el 80% de los Agentes colaboradores (APIs) de Servihabitat corroboran este dato, ya que aseguran que sus clientes buscan viviendas con espacios exteriores.
El mercado del alquiler, el segmento menos afectado
El actual contexto ha permitido al mercado del alquiler consolidarse como una de las opciones de vivienda más demandadas: el 24,1% de los hogares españoles vive en régimen de alquiler y, en los próximos meses, se espera que crezcan el número de operaciones de arrendamiento. Este incremento se debe a que la incertidumbre del momento actual está condicionando la decisión de compra hasta conocer cómo evoluciona el mercado residencial.
El precio muestra una tendencia de moderación, con incrementos leves de un 3,6% en marzo de 2020. Así pues, más de un 49% de los APIs consultados considera que se mantendrán. Si bien es cierto que se espera un aumento de la oferta del parque de vivienda en alquiler porque se sumarán las viviendas que hasta ahora habían estado destinadas al uso vacacional, no se prevé que este hecho tenga un efecto notorio en los precios.
El contexto actual ha cambiado la tipología del perfil inversor; el 70% de las operaciones las están protagonizando los pequeños inversores. Este perfil inversor ve en el inmobiliario un proyecto estable y una buena oportunidad gracias al ajuste de los precios y a la creciente demanda de vivienda en alquiler. Según la opinión de los más de 750 APIs encuestados, el 87% de las operaciones cuenta con un valor de menos de 200.000 euros.