
La Junta de Gobierno de Madrid aprobó este jueves el avance de la modificación de las normas urbanísticas del Plan General de Ordenación Urbana de 1997, con el objetivo de mejorarlas y adaptarlas a la sociedad actual, según informó el Ayuntamiento madrileño.
En este sentido, el Ayuntamiento de Madrid señaló que, a partir de ahora, los pisos de uso turístico solo podrán estar en el bajo o en la primera planta. Además, se ha decidido limitar la implantación de cocinas agrupadas en ámbitos residenciales, conocidas como cocinas fantasma, y suspender la concesión de licencias.
Pisos turísticos
En este avance, se adapta el Plan Especial de Hospedaje a las normas urbanísticas. Respecto a las viviendas turísticas, se permitirá su implantación en planta baja y primera, siempre que no existan viviendas en plantas inferiores, según explicó el Ayuntamiento de Madrid.
Cocinas fantasma
Por otro lado, se han regulado las cocinas agrupadas y el almacenaje con reparto a domicilio, favoreciendo que se trasladen a polígonos industriales y limitando su implantación en ámbitos residenciales a locales de uso industrial con un máximo de 350 m2, con la obligación de que tengan en el interior del establecimiento las zonas de espera, carga y descarga, y estancia de los transportistas.
Además, se ha suspendido durante un año la concesión de nuevas licencias para estas actividades en ámbitos residenciales.