El grupo promotor Petrus, propiedad de la familia Rabassa, invertirá 37,7 millones de euros en la construcción de cuatro nuevos edificios residenciales en las localidades barcelonesas de El Prat de Llobregat y Molins de Rei, en Madrid y San Sebastián de los Reyes.
Así, el proyecto más avanzado es el ubicado en San Sebastián de los Reyes. La compañía prevé concluir a finales de año los trabajos de construcción de un bloque de 38 viviendas, todas ellas ya vendidas. La superficie construida alcanza los 5.400 metros cuadrados y la inversión prevista es de 9,8 millones de euros.
El edificio se ubica en la plaza de la Iglesia y su entrega está prevista para principios de 2021, según ha explicado el vicepresidente ejecutivo de la promotora, Luis Rabassa, en una entrevista con Efe.
Asimismo, la compañía ha comenzado la comercialización de otro edificio en la Comunidad de Madrid con 23 viviendas de uno y dos dormitorios en el barrio de Padre Claret, dentro de los límites de la M-30.
La promoción, denominada Petrus Santa Hortensia, se ha levantado sobre un antiguo hospital oftalmológico, tras cambiar su uso a residencial. El proyecto cuenta con una superficie construida de 3.550 metros cuadrados y la inversión, la más cuantiosa, supera los 12,2 millones de euros.
Proyectos en Barcelona
Petrus también mantiene una intensa actividad constructora en el área metropolitana de Barcelona, como es el caso de El Prat de Llobregat, donde en septiembre comenzará las obras de un edificio de 25 viviendas, la mitad de las cuales ya están vendidas.
La compañía invertirá unos 6,6 millones de euros en esta promoción, que tendrá una superficie construida de 3.050 metros cuadrados y estará ubicada en el centro del municipio, en la emblemática plaza de la Constitución.
Por otro lado, en Molins de Rei, Petrus ha iniciado la construcción de un bloque de 38 viviendas en el barrio de Les Guardioles, cuya entrega está prevista para finales del próximo año.
Esta promoción, que está prácticamente vendida, supondrá una inversión de 9,1 millones de euros y más de 6.200 metros construidos. Todos estos edificios, apunta Rabassa, cuentan con piscina comunitaria, terrazas y amplias zonas comunitarias, unos requisitos que cada vez exigen más los clientes, especialmente a raíz de la crisis del coronavirus.
Petrus hace ya tiempo que no levanta nuevas promociones en Barcelona ciudad debido a la decisión de la actual alcaldesa, Ada Colau, de obligar a los constructores privados a destinar a vivienda protegida el 30% de las nuevas obras de más de 600 metros cuadrados.
Rabassa explica que es muy difícil que en un mismo edificio converjan clientes de perfiles tan diferentes, y eso, «no es ser clasista, sino realista», afirma. «Esto está mal planteado, no es viable», asegura el empresario, que cree que la medida del ayuntamiento alejará a los constructores de obra nueva de la ciudad hacia otras poblaciones cercanas que no planteen estas exigencias.
