La cafetería Hontanares, ubicada en la conocida avenida de América de Madrid, echa el cierre definitivamente tras no poder soportar las pérdidas económicas fruto de las consecuencias de la crisis sanitaria. El local, que contaba con 54 años de historia, recibía más de 1.600 clientes a lo largo del día.
Hontanares disponía de un local privilegiado junto al Intercambiador y estación de autobuses de Avenida de América. Disponían de una barra de 30 metros de largo y terraza, pero las restricciones en la primera acabaron de dinamitar el negocio ante la imposibilidad de la segunda para tirar del carro. Su horario era amplio y tenía 19 trabajadores en plantilla, que llegaron a ser 30.
Además, con el tiempo fueron ampliando con los locales colindantes, hasta disponer de una pastelería con horno propio.
La falta de turismo ha acabado por resquebrajar al antiguo negocio, que al situarse frente a una estación, recibía numerosos viajeros que estaban de paso por la ciudad.
El cierre de la cafetería Hontanares no ha sido el único durante la pandemia. El restaurante Zalacaín -fundado por el navarro Jesús María Oyarbide en 1973 y el primero en España en lograr tres estrellas Michelin-, el mexicano Punto MX, así como el histórico Casa Patas son otros de los negocios de restauración en Madrid que no han podido resistir a este 2020.