Merlin Properties se ha aliado con el desarrollador de edificios inteligentes EDGE Next para llevar a cabo el último proyecto del plan de negocio Landmark.
En 2018, la Socimi liderada por Ismael Clemente presentó un plan de inversión denominado Landmark I, que incluía una inversión de más de 250 millones de euros en actualizar sus edificios de oficinas en Madrid, Barcelona y Lisboa.
Entre ellos, figuraba el conocido como Edificio Sollube. El inmueble, con 36.899 metros cuadrados, que cuenta con un SBA DE 36.899 m2, se ubica en la plaza Ruiz Picasso en Madrid.
Tras ser reformado íntegramente por el estudio Fenwick Iribarren, ahora Merlin pretende incorporar lo último en tecnología, incluyendo la propia plataforma de EDGE Next, para optimizar el funcionamiento del edificio y hacerlo más inteligente y sostenible.
La plataforma utiliza múltiples sensores y bases de datos, no solo para recopilar datos sino también para proporcionar información valiosa y práctica que permita que los edificios, las compañías y las personas prosperen.
Los inquilinos también pueden hacer uso de la aplicación del edificio, la cual permite a los usuarios controlar de forma eficiente características básicas de su entorno de trabajo, como la luz o la temperatura. Está planeado que el activo obtenga los certificados LEED Platino y WELL Core & Shell Gold. Asimismo, pretende ser de los primeros edificios de España en conseguir los certificados WiredScore y SmartScore, certificado que representa la conectividad del edificio.
Además, EDGE Next ayudará a Merlin a incorporar iniciativas sostenibles y tecnológicas en su cartera de oficinas, desplegando así un proyecto a largo plazo que optimizará su desarrollo a través del uso de la tecnología inteligente.
Como parte de esta estrategia, la plataforma Edge Next se pondrá a prueba en uno de los edificios de Merlin a lo largo del 2021, y se espera que haya más implantaciones en un futuro próximo.
Cartera de Merlin
Merlin Properties cerró el primer trimestre de 2021 con unas ganancias de 55,7 millones de euros, un 44,3% más que en el mismo periodo del año anterior. Un aumento que se explica por la variación del valor razonable de los instrumentos financieros y menores costes de deuda. Sus ingresos descendieron un 4,1% respecto al primer trimestre de 2020 hasta los 126,4 millones.
Con respecto a su negocio principal, el alquiler de inmuebles, los ingresos por rentas de Merlin se han situado en 124,6 millones, un 4,5% menos que en el mismo periodo del año anterior. En el caso de las oficinas, su facturación (like for like) fue un 3% menos que en 2020.
No obstante, en este periodo, se contrataron más de 70.000 metros cuadrados de oficinas. De ellos, 20.170 m2 fueron nuevos espacios y 50.492 m2 renovaciones. Por mercado, Meerlin destacó la buena evolución del distrito barcelonés del 22@.
El valor neto del total de sus activos se sitúa en 7.308 millones de euros.
