Nuevo acontecimiento en la disputa entre Banco Santander y el CEO de Merlin Properties, Ismael Clemente. Según ElEconomista, el Consejo de Administración de la Socimi habría alcanzado un acuerdo para mantener a Clemente como consejero delegado, a pesar de los conflictos sucedidos las pasadas semanas.
Además, Javier García-Carranza, presidente de Merlin y número tres del máximo accionista Banco Santander, abandonaría su puesto en la cotizada para dejar paso a un consejero independiente.
Este movimiento supondría un paso atrás de Banco Santander, el cual mantiene una posición crítica con el equipo directivo de Merlin. La entidad presidida por Ana Botín cuenta, de forma directa e indirecta, con el 22,27% de la compañía. Esto le permitide disponer de tres puestos en el Consejo de Administración: Javier García-Carranza, Francisca Ortega e Ignacio Gil-Casares. La posición de Santander en la primera inmobiliaria del Ibex35 está valorada en cerca de 1.000 millones de euros.
El mercado se tomó de forma muy negativa las filtraciones sobre la mala relación de Clemente y García-Carranza, y los intentos de Santander de prescindir de este equipo directivo. A lo largo de esa jornada, el precio de las acciones llegó a caer un 6,34%. Finalmente, ambas partes cerraron el asunto con un comunicado en el que anunciaban «un acuerdo de iniciar un proceso de reforma de la gobernanza, con el objetivo de mejorar la misma en interés de Merlin y de todos sus accionistas».
Banco Santander entró en el accionariado de la compañía fundada por los exresponsables inmobiliarios de Deutsche Bank, en 2016, tras la fusión protagonizada entre Metrovacesa y Merlin.
La Socimi cuenta con una cartera valorada en 7.370 millones de euros. Entre enero y septiembre, logró un beneficio de más de 254 millones de euros y retomó la política de reparto de dividendo.