La aseguradora española Mapfre ha adquirido un edificio de oficinas en el distrito financiero de Luxemburgo, que actualmente es sede del despacho de abogados Clifford Chance.
El inmueble dispone de con 5.195 metros cuadrados, de los que el 82% de la superficie corresponde a las oficinas, y que cuenta con la certificación BREEAM de sostenibilidad. La compañía no ha desvelado el precio de la operación; sin embargo, fuente del sector apuntan a que se ha adquirido por 60 millones.
La transacción, realizada mediante la compra de la sociedad propietaria del activo, se ha ejecutado a través del fondo SIEREF-GLL que se lanzó con su socio-gestor GLL Real Estate Partners (Grupo Macquarie). Este fondo contemplaba invertir hasta 300 millones de euros en inmuebles prime en los principales mercados europeos en un plazo de dos o tres años.
Desde entonces, se han comprometido ya 150 millones mediante la compra de edificios en París, Hamburgo, Milán y Luxemburgo. Mapfre aporta el 50% del capital y el resto se distribuye entre un grupo de seis inversores institucionales, principalmente de los sectores asegurador y financiero y el propio GLL.
Diversificación de su cartera
Dentro de la inversión inmobiliaria a través fondos, Mapfre mantiene además una joint venture con Swiss Life Asset Managers France, con la que se ha alcanzado ya el volumen comprometido de 375 millones de euros con la compra de importantes edificios en París.
A su vez, dentro del segmento de inversiones alternativas, la aseguradora lanzó este año dos fondos de fondos de la mano de su socio Abante, el primero destinado al private equity, para el que firmó un acuerdo con Altamar, y otro de infraestructuras, que tiene como subyacente fondos gestionados por Macquarie.
Estas inversiones están enmarcadas dentro de su estrategia de diversificar la cartera frente a otro tipo de activos financieros e incrementar gradualmente sus inversiones alternativas, con objeto de defender la rentabilidad en un entorno de tipos de interés en mínimos históricos. En este sentido, el Consejo de Administración de Mapfre autorizó a mediados de 2019 la inversión de otros 500 millones de euros en inversiones alternativas, que se sumaban a los 550 aprobados previamente.