Propiedad de la empresa de capital español Naurigas Empredimientos, participada por las familias Matutes y Espallargas, y desarrollado por Seed Global Advisoring (SGA), esta nueva ciudad «sostenible e inteligente» de más de 1.000 hectáreas se caracterizará por recuperar el equilibrio entre sociedad y naturaleza para mejorar la calidad de vida de sus habitantes. Para esta ciudad se han proyectado viviendas, espacios educativos, centros médicos o instalaciones turísticas, pero sobre todo espacios verdes. El proyecto contempla que solo el 14% del terreno se cubra de carreteras y edificios, el 86% restante se repartirá entre áreas protegidas como lagunas naturales, dunas y zonas verdes como parques.
El proyecto concebido en España y que se ubica en el municipio de Entre Ríos, en el litoral norte del estado de Bahía (Brasil), ya se encuentra en marcha y tiene previsto comenzar su desarrollo en el segundo trimestre de 2021.
Además, se trata de un modelo replicable que, a medio largo plazo, se prevé implantar en cada continente.
La iniciativa es propiedad de la empresa de capital español Naurigas Emprendimientos, participada por las familias Matutes Mestre y Espallargas, y conceptualizado y desarrollado por Seed Global Advisoring (SGA), empresa española especializada en desarrollo de proyectos. El proyecto también cuenta con una asociación estratégica e inversiones de Siemens, socio de referencia.
En cuanto a la inversión total del proyecto se estima en más de 2.000 millones de euros, así como un PIB de 1,2 billones de euros anuales y una expectativa de empleo de más de 30.000 personas en 15 años. Hasta el momento, se han invertido más de 20 millones de euros y se prevé una inversión de 250 millones adicionales en la primera fase, que se prolongará durante los tres próximos años.
Impacto social y sostenibilidad
Aguaduna abarcará un área total aproximada de 1000 hectáreas. Se estima que, en un período de 15 años, Aguaduna acogerá a 36.000 residentes, lo que tomando en consideración la población actual de Entre Ríos supone un crecimiento sostenido del 10% anual.
Además, habrá una generación estimada de más de 30.000 puestos de trabajo para trabajadores no residentes en las áreas de servicios y comerciales, científicos y profesionales de la tecnología, la salud, la educación y la agroindustria, así como una capacidad diaria para recibir 5.500 turistas.
«Elegimos Brasil como primer proyecto por su apuesta por acoger nuevas tendencias, avances e innovaciones. Además, se trata de una gran oportunidad para resolver los grandes desafíos en áreas como la infraestructura, la urbanización, la movilidad y la sostenibilidad», dice Al Masri.
