El decreto que prohibirá los desahucios a hogares en alquiler provocará unas pérdidas acumuladas de 9.436 euros a cada propietario por haber estado 14 meses sin cobrar rentas, así como un volumen medio de morosidad de 132,7 millones de euros, según estimaciones de la Agencia Negociadora del Alquiler (ANA).
Este cálculo es el resultado de analizar la situación de impagos desde el inicio de la pandemia tomando los datos de lanzamientos por impago de alquiler del Consejo General del Poder Judicial, lo que refleja datos «alarmantes», según la agencia.
Así, se estima que la suspensión de los desahucios, que aprobará mañana el Consejo de Ministros hasta el 9 de mayo de 2021, ocasionará pérdidas totales de más de 9.000 euros a cada arrendador de vivienda que desde que se iniciara el estado de alarma ya viniera sufriendo impagos de rentas.
En este sentido, el director General de la Agencia Negociadora del Alquiler, José Ramón Zurdo, ha explicado que el impacto estimado es de 14 meses desde la primera suspensión de los lanzamientos (31 de marzo) hasta la última prórroga, que previsiblemente durará hasta la finalización del estado de alarma prevista para el 9 de mayo.
De forma que la morosidad media en el alquiler llegará a la cifra de 132.689.000 euros por los lanzamientos que no se han llevado a cabo por impago del alquiler.
Desahucios en 2020
Hasta el tercer trimestre de 2019 se realizaron un total de 27.157 lanzamientos por desahucios por no pagar el alquiler; mientras que en el mismo período de 2020 se han producido 13.095 lanzamientos.
Según la agencia, si estos se restan a la cifra total del año pasado, significa que por las medidas adoptadas por el Gobierno durante los estados de alarma «se han dejado en suspenso hasta el tercer trimestre de 2020, inclusive, 14.062 lanzamientos a cargo de propietarios que no les han pagado la renta de alquiler».
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El precio medio del alquiler de vivienda en España alcanzó en el tercer trimestre de 2020 los 10,2 euros el metro cuadrado al mes, mientras que el importe medio se situó en 1.005 euros al mes, lo que supone un descenso del 8,4% frente al primer trimestre del año, en consonancia con el endurecimiento de la economía.
En cuanto al importe mensual, tan solo cinco municipios se encontraban por encima de la media española. Barcelona lideró el ‘top 25’ con un precio medio de 1.405 euros al mes, Madrid con 1.301 euros al mes y Palma alcanzó un importe medio de 1.195 euros al mes, según datos de la plataforma de big data inmobiliario Brains RE.