Témpore, la Socimi de pisos en alquiler creada por Sareb, registró unas pérdidas de 3,8 millones de euros en 2019, lo que supone multiplicar por diez los números rojos del ejercicio anterior. La compañía ha justificado la mala evolución por el incremento de costes derivado del aumento de actividad.
La firma dirigida por Nicolás Saldaña cerró el año en pérdidas a pesar de que aumentó un 55% los ingresos logrados por las rentas de alquiler de su cartera de viviendas, que sumaron un total de 11,07 millones de euros.
Témpore, controlada al 75% por el fondo TPG, duplicó durante el ejercicio pasado sus costes de personal, que ascendieron a 743.000 euros, y disparó un 67% los gastos de explotación, que alcanzaron los 9 millones de euros.
Parte de este aumento deriva de la firma del contrato de gestión firmado con Azora por 2,6 millones de euros. La Socimi ratifica en sus cuentas su estrategia de negocio, centrada en la puesta en valor de su actual cartera de 2.500 viviendas, mediante la «optimización de su ocupación y sus rentas», y en paralelo, en su crecimiento mediante compras.