
La socimi Ibervalles termina el año en el que debutó en bolsa con una nueva adquisición de calado. La firma ha celebrado esta mañana una Junta Universal de Accionistas para aprobar la adquisición de un nuevo edificio destinado a oficinas en Madrid, que para la compañía tiene condición de activo esencial y, por lo tanto, la operación no baja de los 26,5 millones de euros, pero de la que aún se desconoce su precio concreto.
De acuerdo con lo expuesto en el artículo 160 de la Ley de Sociedades de Capital, es competencia de la junta autorizar la adquisición de activos esenciales, considerando como tales aquellos cuyo coste de la transacción supere el 25% del valor de los activos que figuren en el último balance aprobado.
En los últimos resultados presentados ante el BME Growth el pasado 28 de octubre, y con fecha de 30 de junio, la socimi declaró tener un patrimonio neto de unos 107 millones de euros, con lo que el 25% se sitúa en unos 26 millones.
Esta es la primera operación de Ibervalles desde que debutó en BME Growth el pasado 27 de julio y será la cuarta en lo que va de año. En el mes de mayo incorporó a su cartera de activos los edificios de C/ Josefa Valcárcel 24 y C/ Alcalá 506, que hasta el pasado mes de mayo pertenecían a Inmobiliaria Colonial, y que ahora se encuentran en pleno proceso de reposicionamiento para adaptarse a la demanda de mercado actual sobre oficinas clase A.
Asímismo, en el mes de febrero Ibervalles adquirió a la Socimi Millenium Hospitality Real Estate la sociedad propietaria del hotel Vía Castellana, con activos en los números 218 y 220 de la principal arteria de Madrid.
Constituida como socimi en 2020, el objetivo de la compañía es la adquisición y gestión de activos de oficinas value-added situados en las zonas de referencia de Madrid y Lisboa. Actualmente, Ibervalles gestiona directamente una cartera de activos por importe en 246 millones de euros, tras las operaciones realizadas y consolidadas desde el pasado 30 de junio.