Según los datos actualizados por el Banco de España (BdE), en esas cifras se incluyen tanto las moratorias legislativas, que incluyen aquellos afectados por la crisis del coronavirus que cumplían los requisitos fijados por el Gobierno, como las moratorias sectoriales.
En el caso de las moratorias hipotecarias, a cierre de julio las entidades tenían concedidas 221.053 moratorias, un 82,5% de las 267.763 solicitadas, con un saldo vivo de 19.957 millones, prácticamente los 20.000 millones. Ya en junio, los bancos habían concedido 1,1 millones de moratorias hipotecarias y no hipotecarias, con un saldo vivo pendiente de amortización de 41.160 millones.
Hay que recordar que a principios de julio, el Real Decreto-Ley en el que se incluye la prórroga hasta septiembre de las moratorias de hipotecas y de alquiler entró en vigor tras su publicación en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
En cuanto a los créditos de consumo, habían recibido 438.496 peticiones de moratorias legislativas de préstamos de consumo y se habían otorgado a 374.962 personas, un 85,5% con un saldo pendiente de amortización de 2.790 millones de euros.
Las solicitudes de moratorias sectoriales, acordadas voluntariamente por las entidades, ascendieron a 674.334, de las que se han concedido 594.780 a cierre de julio, un 88 %, con un total de 22.256 millones pendientes de amortizar.
Un 70%, asalariados
La gran mayoría de deudores beneficiarios y avalistas (por encima del 70%) son asalariados. Respecto a los trabajadores autónomos, el desglose por ramas de actividad muestra de nuevo que, para los tres tipos de moratoria, los principales sectores beneficiarios son comercio, hostelería y otros servicios, seguidos de actividades profesionales, científicas y técnicas, transporte y construcción.
En conjunto, estos sectores de actividad representan más del 75% del total de moratorias para autónomos a las que se ha dado curso hasta la fecha, explica el Banco de España.
Sector turístico y de transporte
A principios de julio se aprobaron dos nuevas moratorias legislativas, referidas al sector turístico y al sector del transporte público de mercancías y discrecional de viajeros en autobús, que también arrojan datos a tener en cuenta. El número de solicitudes de moratoria legislativa para el sector turístico se situaba en 96, de las cuales se había dado curso a 22, que suponen un saldo pendiente de amortización de 8,4 millones.
Por su parte, las solicitudes de moratoria legislativa referida al transporte ascendían a 123 y se habían aprobado 90, con un saldo pendiente de amortización de 9,8 millones.