El juzgado de lo mercantil número 6 de Madrid ha acordado la salida a subasta de los bienes de la quebraba Reyal Urbis a partir de septiembre. Según Cinco Días, el precio conjunto de los bienes alcanzaría los 220 millones de euros. Los inversores interesados deberán esperar hasta el 21 de septiembre, momento en el que el juzgado dará más información.
En el momento de esta quiebra, Reyal Urbis contaba con una deuda de 4.660 millones. Solo la superó la de Martinsa-Fadesa, que ascendía 7.200 millones de deuda.
La colección de activos que sale a subasta son la cadena de hoteles Rafaelhoteles con inmuebles en Atocha, Ventas, Alcalá de Henares, Badalona y un complejo de lujo en Baqueira-Beret, tal como adelantó Brainsre.news. También, un proyecto hotelero en Castellana 200, edificios de oficinas y suelos.
En el momento del concurso, en 2013, contaba con un banco de suelo de 6,7 millones de metros cuadrados edificable, 214 viviendas en stock y 103.000 metros cuadrados de patrimonio en renta, incluyendo los citados hoteles.
Ahora se pueden comprar desde 12 parcelas situadas en Arpo valoradas en 10,7 millones de euros, uno de los últimos desarrollos pendientes en Pozuelo de Alarcón y por ende, de Madrid, a una participación minoritaria del complejo Castellana 200.
También salen a la venta dos fincas en Málaga por algo más de 8 millones, suelos en Castellón, edificios de oficinas alquilados en León o Santa Cruz de Tenerife…
El mayo acreedor de Hacienda
Rafael Santamaría compró el 100% de Urbis a través de una opa, por valor de 3.300 millones. Este importe es muy similar a la deuda con la que acabó en liquidación.
La promotora liderada por Rafael Santamaría mantiene una deuda con el fisco de 343,5 millones de euros. En el último año, ha sido reducida en casi diez millones. Este acreedor tiene prioridad en el cobro y, actualmente, ejerce como administrador de la sociedad.
A finales de 2016, contaba con una cartera de activos valorada en 1.170 millones de euros, según la valoración de Knight Frank, para hacer frente a una deuda de 4.660 millones, y un agujero patrimonial de 3.449 millones.
