
El edificio donde se llevará a cabo el proyecto dispone de 3.169 metros cuadrados repartidos entre el sótano, la planta baja y seis alturas, además de una terraza, informa Valencia Plaza. Las pretensiones de los promotores son transformar el inmueble en un hotel de cuatro o cinco estrellas con 70 habitaciones aproximadamente.
Además también quieren proyectar un restaurante aprovechando las amplias dimensiones disponibles. Aún no han decidido quien será el operador que explotará el hotel.
El acuerdo, que ha sido asesorado por Olivares Consultores, se ha fraguado a tres bandas, entre la firma inversora y la propiedad. En cuanto dispongan de la licencia de obras, comenzarán con la rehabilitación.
Esta operación se ha llevado a cabo en un momento en que gracias al aumento de turistas y a la mejora de la rentabilidad, Valencia se ha convertido en un foco atractivo para inversores y el desarrollo de proyectos hoteleros.