

La marca de ropa GAP realizará una revisión estratégica de su actividad en Europa. La firma estudiará la viabilidad empresarial y se plantea cerrar tiendas de forma masiva. Así lo ha anunciado en un comunicado Mark Breitbard, director internacional de la marca. GAP también plantea la posibilidad de que inversores entren como franquiciados para poder continuar con su expansión internacional.
En caso de que finalmente tuviese lugar el cierre supondría la clausura de 129 tiendas en Europa, después de que la compañía ya lo hiciese con once entre febrero y agosto de este año. Estos cierres se suman a los 66 efectuados en Norteamérica y los 10 en Asia. La intención era ahorrar 90 millones durante el trascurso del ejercicio de 2020, pero la llegada de los confinamientos ha acabado por romper los planes empresariales.
La firma estadounidense ya anunció en agosto el cierre de 225 tiendas a nivel mundial para este año. La intención en el momento de esa decisión era crear una marca más pequeña, pero más saneada. Los cierres también tuvieron en cuenta a otras marcas propiedad de la empresa como Banana Republic u Old Navy.
GAP cuenta en España con una flagship en Barcelona que no sufrirá las consecuencias de esta revisión estratégica. La boutique de Barcelona de 900m² es propiedad de un franquiciado y no está sobre la mesa su cierre. Ubicada en el Barrio Gótico cuenta con una zona de customización de prendas que es un factor diferenciador respecto a otras tiendas de la marca.
GAP cotiza en la Bolsa de Nueva York ($GPS) por 21$ la acción. Está previsto que para el ejercicio de 2020 la empresa pierda un billón de dólares americanos consecuencia de la crisis actual. En el tercer trimestre del año ya reportó un beneficio negativo de -0,17$ por acción. A pesar de esto, las acciones se han disparado en la última semana porque la empresa ha anunciado un plan estratégico de crecimiento hasta 2023.