Con esta compra, la compañía suma cinco gimnasios en su cartera: uno en Lleida, dos en Sevilla, uno en Madrid y otro en Tarragona.
El centro deportivo cuenta con unas instalaciones de 7.900 metros cuadrados y dispone de una sala de fitness, un espacio para actividades dirigidas, piscina y spa. También cuenta con pádel, club de running, ciclismo, triatlón y submarinismo.
El gimnasio se inauguró en 2007, tras dos años de obras y un presupuesto de 15,36 millones de euros. El complejo cuenta con 8.000 abonados, una cifra que Viding cree que se puede aumentar, aunque su objetivo es mantener y relanzar el servicio para elevar el ingreso medio por cliente. Viding mantendrá a todo el personal y al equipo de gestión liderado por Pep Castarlenas, informa Palco 23.
Por otro lado, Viding invertirá entre doce y quince millones de euros en el proyecto de su primer centro propio en Madrid. Se trata de un club entre el Paseo de la Castellana y Avenida Pío XII. La compañía está pendiente de la obtención de la licencia de obras para comenzar las obras del centro que contará con 11.000 metros cuadrados aproximadamente.
