El Gobierno debate desde hace días qué hacer con el pago de los alquileres, tanto de viviendas como de locales, para aquellas personas que se hayan visto afectadas por los efectos de la pandemia del coronavirus y aplicar una medida similar a la ya tomada con las hipotecas.
La primera opción planteada por Unidas Podemos era imponer la condonación general de las rentas de viviendas o locales a todas aquellas familias, autónomos y pymes que hayan sido perjudicadas económicamente. La alternativa a esta propuesta y defendida por Calviño pasa por combinar el incremento de las ayudas al alquiler con la imposición de aplazamientos de los pagos con garantías del Estado. En este sentido, el Gobierno estudia pagar el 100% del alquiler a los pequeños propietarios y el 5% a los grandes, según Efe.
La propuesta de máximos, cercana a las tesis de Pablo Iglesias, sugiere una suspensión del alquiler de dos meses -no un retraso o moratoria – y que se pueda prorrogar hasta el mes siguiente a que termine el estado de alarma. Calviño y otros miembros del Ejecutivo de Sánchez abogan sin embargo por esta última alternativa de aplazamientos.
Si finalmente se aprueba esta última opción, los inquilinos que podrían beneficiarse son aquellos que hayan perdido su empleo, reducción de jornada, ERTE o «deberes de cuidado». También podrían acogerse autónomos y pymes que «hayan sufrido una caída sustancial de sus ingresos».
