Los precios para alquilar una habitación en Madrid han disminuido a causa de la pandemia del coronavirus. Según portales como Idealista o Pisos.com, la caída se situaría en un 3% y un 2% respectivamente, descensos que los propietarios no esperan recuperar hasta después del verano, informa El Diario.
Es fácil detectar bajadas de precios en los pisos si navegamos por internet, como es el caso de una propietario que ha rebajado un 50% el precio de las habitaciones que alquila, pasando de costar 600 euros a 300 euros, aunque con pretensiones de volver a subirlo de nuevo a partir de septiembre.
Por otro lado están los estudiantes, que muchos de ellos abandonaron su piso de Madrid para volver a su residencia familiar y permanecer allí durante el confinamiento, por lo que o bien han rescindido el contrato o han negociado el precio.
Además, hay que tener en cuenta la gran cantidad de estudiantes que residen en Madrid y que no son solo de otros puntos de España, sino también del extranjero. De un total de 131.000 estudiantes que fueron a cursar sus estudios a madrid, 81.000 eran españoles y los 50.000 restantes, de fuera. Es difícil predecir por tanto que pasará, sin saber si habrá clases el próximo curso.
Distintas necesidades
Sin lugar a dudas, los meses de confinamiento han cambiado las preferencias a la hora de buscar una vivienda. Así le ocurrió a Carlos, que se dio cuenta que necesitaba un piso con más luz y más espacio, por lo que decidió mudarse a otro que cumpliera con esas características y además, lo hizo por el mismo precio de 400 euros al mes por una habitación.
Previsiones
Es pronto para poder dar cifras de los efectos que causará el Covid-19, aunque los expertos no esperan grandes caídas. «El efecto sobre el alquiler de habitaciones es más atenuado, la economía del propietario tiene menos riesgo porque se divide y se diluye el impacto de la menor capacidad de pago del inquilino», señala Ferran Font, director de estudios de Pisos.com.
Tampoco se puede saber aún cómo afectará al mercado la migración del alquiler de pisos turísticos hacia alquileres tradicionales y si estos últimos lo harán por habitaciones. Hasta el momento se cifra en un 11% ese traslado por parte de Airbnb y otras plataformas, indica Pisos.com.
Por otro lado, la incertimbre es un factor que no beneficia las expectativas sobre el mercado de la vivienda. «Ya éramos el país de la OCDE que más paga de nuestra renta por alquiler», los jóvenes por debajo de los 25 años destinan un 40% de su sueldo a pagar un alquiler, por lo que el investigador considera que «este contexto refuerza el poder de negociación de los inquilinos», apunta Javier Gil, investigador y miebros del Sindicato de Inquilinas e Inquilinos de Madrid.