El Ayuntamiento de Zaragoza acaba de sacar a concurso cuatro parcelas de suelo en diferentes zonas de la ciudad donde posibilitará la promoción de 206 viviendas de protección oficial. El volumen global de la operación urbanística es de 5,5 millones de euros, IVA no incluido. ¿El plazo para presentar ofertas? Hasta el 20 de septiembre.
Los cuatro suelos provienen de las cesiones al Ayuntamiento que la ley establece para planes urbanísticos, según informa el Heraldo. Por su volumen, el mayor desarrollo estaría en La Jota. Allí, el plan es vender dos parcelas con capacidad para 63 y 84 viviendas. La primera, de 1.915 metros cuadrados, linda con la calle Manuel Viola y cuesta 1,8 millones de euros. La segunda, ubicada más al norte, junto a la calle Joaquín Numancia, cuenta con 1.720 metros cuadrados y sale a concurso por 2 millones.
Además de las parcelas ubicadas en La Jota, el consistorio quiere enajenar dos parcelas más: los suelos de la antigua factoría de Averly, en el paseo de María Agustín, y unos terrenos en Santa Isabel, junto a la N-II. Por su parte, la antigua Averly cuenta con 883,27 metros cuadrados, un espacio donde el comprador podrá promover 35 viviendas protegidas que cuesta 1,05 millones de euros. Por otra parte, los terrenos cuentan con capacidad para otras 24 viviendas, repartidas en una edificabilidad de planta baja más dos alturas, con un precio de salida de 609.361 euros.
Según los pliegos de condiciones, se trata de precios mejorables al alza, siempre que no superen el importe máximo de repercusión del suelo y la urbanización que establece la ley. ¿Condiciones? La oferta deberá incorporar un anteproyecto arquitectónico y tener en cuenta las mejoras en materia de eficiencia energética y los plazos de promoción de las viviendas.
Este 2022, el Ayuntamiento de Zaragoza prevé el ingreso de 14 millones de euros por venta de suelo. De adjudicarse esta operación, se sumaría a otras ventas de patrimonio desarrolladas últimamente, como la de los terrenos para 90 VPO en la calle Biel (2,8 millones); las 64 viviendas en la avenida de Cataluña (1,9 millones); las 77 viviendas de los depósitos de Pignatelli (10,9 millones); la venta del subsuelo de la escuela infantil de Bruil o las parcelas de uso industrial en Empresarium para Saltoki o Becton Dickinson.
