BBVA y Cerberus han establecido los términos definitivos de la operación anunciada en noviembre de 2017 para la adquisición por parte del fondo estadounidense del negocio inmobiliario del banco. Los dos socios han creado una compañía conjunta, Divarian, en la que Cerberus controla el 80% del capital y BBVA, el 20% restante.
Además de por el menor volumen de activos traspasados, el precio de venta también se ha ajustado por los ingresos y gastos asignados a los activos, y por costes de personal, según informa Expansión. «La operación inicialmente prevista comprendía activos inmobiliarios por un valor bruto contable de 13.000 millones de euros, junto a los activos y empleados necesarios para la gestión de la actividad de forma autónoma. Dicho acuerdo valoraba el negocio en 5.000 millones de euros, por lo que el importe de venta del 80% de las acciones ascendería a 4.000 millones», destacan las cuentas anuales de 2018 de Divarian, últimas cifras públicas disponibles.
El precio definitivo de la transacción dependerá del volumen final de activos traspasados a la sociedad, que podría variar por las ventas realizadas por BBVA entre el anuncio del pacto y la firma del acuerdo, entre otros motivos.
