
El fondo de inversión Cerberus ha creado la empresa MACC Residencial, especializada en la gestión de viviendas en alquiler, que cuenta con una cartera de miles de pisos que compró a Banco Sabadell, BBVA y Santander.
Aitor García Bilbao es quien está al frente de la filial. El directivo cuenta con más de 25 años de experiencia en el sector pasando por compañías como Unilever, Bergé y Azora, primero como director financiero de Resa (residencias de estudiantes) y después como consejero delegado de Azzam, gestora especializada en vivienda, según informa El Confidencial.
Asimismo, en la presidencia, está Wijnand Donkers, que se incorporó a Cerberus en marzo del año pasado para aprovechar el auge del mercado del alquiler.
Aunque MACC Residencial se constituyó formalmente el año pasado, ha sido a partir de esta primavera cuando han empezado a reorganizar societariamente todas las viviendas que ha adquirido Cerberus a los bancos.
Activos valorados en 600 millones
Dentro de este entramado está la Socimi Promontoria MACC Residencial 1×1 y una gestora de asesoramiento estratégico, Promontoria MACC Residencial, que cuelga a su vez de Promontoria MACC Holdco, sociedad al frente de la cual Cerberus ha puesto a Francisco Sancha, el que fuera director general adjunto de Banco Popular.
El fondo Cerberus ha inyectado a la compañía activos por valor de 600 millones de euros, entre efectivo (65 millones) y participaciones en cuatro firmas inmobiliarias en las que ha ido ordenando todas las viviendas, suelos y naves que adquirió a Sabadell con las carteras Challenger y Coliseum, formadas por inmuebles que se había adjudicado el banco y cuyo valor bruto contable superaba los 9.000 millones de euros.
Tras Blackston, el fondo estadoundiense es el mayor comprador de ladrillo español y está detrás de diferentes empresas ligadas a este mercado, como el ‘servicer’ Haya o la ‘prop-tech’ Housell.