El Presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha anunciado este martes el cierre de la hostelería y restauración, salvo lo que se refiere a comida para llevar y servicio a domicilio, la clausura de centros y de parques comerciales, salvos establecimientos de bienes y servicios de primera necesidad y los establecimientos individuales de menos de 2.500 metros cuadrados de superficie con acceso directo e independiente del exterior, desde las 00.00 horas del próximo viernes 6 de noviembre.
Se mantiene abierto el comercio minorista en todos los casos siempre con las medidas de higiene y seguridad, se cierran instalaciones y centros deportivos para la realización de actividad física que no sea al aire libre, salvo para la práctica de la actividad deportiva oficial. Se suspenden también las visitas a las residencias de personas mayores y de centros de protección de menores con algunas excepciones.
Castilla y León está en riesgo máximo con un índice de 828 casos por cada 100.000, por eso es preciso hacer un llamamiento a la concienciación social y a la responsabilidad individual, apuntaba el Presidente de la Junta.
La comunidad, que ya había realizado confinamientos a lo largo de todo el verano, no ha conseguido frenar la expansión del virus y ahora quiere dar un paso más ante una segunda ola que arroja datos alarmantes.