La firma Blackstone gestionará para otros fondos y bancos la tramitación urbanística de suelos a través de su servicer inmobiliario Aliseda.
Aliseda es el ‘servicer’ inmobiliario de Quasar, sociedad de Santander y Blackstone, que agrupa la cartera dañada de Popular.
El objetivo de Blackstone es abrir la gestión urbanística de Aliseda a terceros, más allá de Quasar, según han explicado los responsables de Aliseda a Cinco Días. Blackstone pagó a Santander 5.100 millones de euros en 2017 para hacerse con el 51% de esa cartera. El valor inicial del portfolio de terrenos se valoró en más 1.500 millones.
Poner en valor
El objetivo de la gestión urbanística es dar valor a suelos que no tengan carácter finalista o que se encuentran encallados en los procesos de planeamiento municipal, según las mismas fuentes. Se trata de procesos complejos y de larga duración en el tiempo, pero que pueden determinar que una finca tenga un precio nulo a revalorizarse.
La compañía creó un equipo específico para la rama urbanística, liderado por Laura Fernández, General Counsel y directora del área de Gestión de Suelo, y Adolfo Blázquez, director de Suelo. Además, invirtió en el desarrollo de tecnología propia. “Muchos suelos están desfasados”, admite Fernández, la directora del área de gestión de suelo.
Fernández asegura que abren la gestión a fondos y bancos, “clientes parecidos a nosotros y que no tienen la especialización de gestión urbanística”. De hecho, considera que debido a la enorme presencia de Blackstone en Madrid, Canarias, Galicia, Andalucía o Comunidad Valenciana, ya coinciden con otros grandes tenedores en los mismos suelos.
Recientemente, Aliseda lanzó una plataforma de compraventa de viviendas 100% digital. En este nuevo canal de venta se han incluido unas 9.000 viviendas y locales, que tienen en el mercado Aliseda y Hola Pisos.