Los precios de la vivienda continuarán subiendo en España, al menos, al ritmo de la inflación, según afirma Bankinter en su informe inmobiliario de octubre.
En concreto, la entidad dirigida por María Dolores Dancausa, que ha revisado al alza sus previsiones, espera que el precio de la vivienda repunte un 4% en 2021, frente a la caída del 1% prevista anteriormente. Además, calcula que los precios aumentarán en 2022 y 2023 un 2% y un 1%, respectivamente.
Las principales razones del incremento de precios son, según indica el banco, el crecimiento de la renta disponible de los hogares, que está recuperando los niveles previos a la pandemia de coronavirus; los bajos costes de financiación, que mantienen la tasa de esfuerzo por debajo de la media histórica, y el alto atractivo de la vivienda como inversión, ya que los cambios legislativos relacionados con el alquiler «tendrán una aplicación práctica geográficamente limitada, que no alterará sustancialmente el ‘status quo’ actual, salvo, tal vez, en localizaciones muy concretas».
Las zonas ‘prime’ de las ciudades, rezagadas
Sin embargo, Bankinter destaca que las zonas ‘prime’ de las principales ciudades de nuestro país quedarán rezagadas en esta subida de precios de la vivienda.
Según señala la entidad, la pandemia de coronavirus y el teletrabajo están favoreciendo el traslado de una parte de la población desde el centro de las grandes ciudades a la periferia y la migración de otra a sus lugares de origen.
Medio millón de compraventas al año
Por último, el banco dice que la actividad inmobiliaria recuperará este año los niveles previos al Covid-19, apoyada en la elevada demanda nacional y la vuelta de extranjeros a partir del segundo semestre de 2021. Concretamente, Bankinter espera que las transacciones de vivienda aumenten un 20%, frente al 10% previsto anteriormente.
«Prevemos que se estabilicen en torno a 500.000 transacciones en 2022, nivel que consideramos sostenible a medio plazo», apunta la entidad, que indica que la «composición debería ser de 100.000 transacciones de vivienda nueva y 400.000 de segunda mano».
«Todavía hay margen de crecimiento para la obra nueva. Aunque la construcción de vivienda nueva ha subido con fuerza en los últimos años, hasta cerca de 90.000 unidades iniciadas en 2021, se encuentra todavía por debajo de la demanda estructural, que cuantificamos en unas 100.000 viviendas al año», concluye el banco.
