La Socimi especializada en la compra y posterior alquiler de viviendas de personas mayores perdió 805.238 euros, pese a multiplicar por 3 su cartera de inmuebles, en plena expansión de su negocio.
Almagro ha cerrado 2019 con más de 8.300 metros cuadrados en cartera, correspondientes a 58 inmuebles adquiridos en la ciudad de Madrid a 31 de diciembre en 2019. Este dato supone un incremento del 310% con respecto al cierre del año pasado.
El 82% de las viviendas compradas se sitúan en la zona prime de Madrid, mientras que el 18% en zonas con alto potencial para alquiler tales como Fuencarral, Cuatro Caminos o Lavapiés, explican desde la empresa.
Para atender el crecimiento del volumen de compras, la sociedad completó con éxito su tercera ampliación de capital con sobresuscripción y por un importe de 16,3 millones de euros para afrontar nuevas adquisiciones. Entre las inversiones que se han llevado a cabo, destaca la compra de una cartera de inmuebles a la Sareb.
En pérdidas
Pero la fuerte expansión realizada le ha pasado factura a la Socimi: cerró 2019 con unas pérdidas de 805.238 euros, un 98,9% más que un año antes, cuando registró también un resultado negativo por valor de 404.868 euros, «en línea con lo esperado», precisan.
La empresa argumenta que ha realizado una «fuerte inversión en los primeros años para constituir una cartera inmobiliaria atractiva y que pueda ofrecer buenas rentabilidades» y prevé que dichos resultados se revertirán a «medida que se consolide el crecimiento de Almagro Capital y tenga lugar la puesta en valor y desinversión de la cartera de activos.
Como punto positivo, el NAV de la compañía asciende y se sitúa a 1.16 euros por acción según el último informe de valoración de activos, donde no se incluye el 100% de los inmuebles que la compañía tiene a día de hoy en cartera. Esta revalorización, junto con la puesta en valor de los activos esperada, son la base para conseguir retorno a largo plazo.
Los activos de la Socimi no están expuestos a una posible desaceleración de la demanda en el mercado del alquiler, una potencial renegociación de rentas, ni existe un riesgo de crédito con los inquilinos, precisan desde la compañía.
“Almagro Capital continuará creciendo y aportando una solución transparente a las personas mayores para que puedan monetizar su patrimonio inmobiliario permaneciendo en su hogar de por vida, completando así los ingresos del sistema público de pensiones español para atender su gasto sociosanitario y preservar su bienestar”, explica Luis de Ulíbarri, presidente y cofundador de Almagro Capital.